Mi Proceso de Escritura
Con el pasar de los años y experiencias haciendo lo que me gusta, podría decirse que he aprendido un par de cosas para la hora de sentarme a plasmar una idea y con las que poco a poco, he mejorado. Nada fantástico o único, solo las costumbres que obtuve para escribir historias que llevan más de una o pocas partes. Cuando la creatividad me ataca y parece que tiene la capacidad de durar por más de unas pocas partes, la cosa se pone mas complicada, porque para que funcione, debo organizarme, tanto la idea para no olvidar ningún detalle, como a mi misma, para poder sacar el tiempo de escribir dicha idea. Y eso puede ser algo complicado. Sinceramente sigue siéndolo, pues todavía no encuentro la formula adecuada.
Lo primero que siempre hago, por supuesto, es pensar bien la idea. De comienzo a final. Una costumbre a la que aprendí a apegarme al incurrir en los errores del pasado, cuando sin pensarlo solo escribía y escribía, sin un punto de llegada o una meta, haciendo que me perdiera en una y tantas vueltas y nunca lograra llegar a un bendito final con la historia. Muchas de mis viejas historias hoy en día no cuentan con un final, y es por esta misma razón. Fueron tantas las vueltas que di en la trama, que para cuando quería llegar a un final, me encontraba enredada a mi misma con giros y giros de una trama que no podía desenvolver. Es por esto que en el ultimo año, he tomado la costumbre de hacer una linea de tiempo con las ideas fundamentales, comienzo y final bruto, para que así, solo tenga que pensar en las ideas secundarias sin preocuparme de que no encuentre una luz en el final del túnel. Teniendo escrito frente a mi un punto de inicio y de llegada, se me hace más fácil concentrarme en el medio, y si por cosas del destino la trama hace que los giros lleguen a un incluso mejor final, pues bienvenido sea. Es una mezcla extraña de orden, y lo que pase en el camino. La verdad no sé si se logre entender este método porque la verdad todo es un desorden en mi mente, pero ahí todo tiene su sentido.
Otra cosa que hago (y me encanta) es pasar horas y perder tiempo de mis días pensando en posibles títulos, porque por alguna razón me es divertido. No lo se. Incluso muchas veces con ver una palabra se crea en mi mente una posible historia que tiene que ver con el significado de la palabra. Tanto títulos, como posibles prólogos, nombres, ambientaciones, esos detalles que siempre emocionan.
Cuando tengo lista una idea, y la paso a una linea de tiempo, es cuando comienza el trabajo duro. Todo lo de antes, son juegos de inspiración. Pero ahora, ahora es que comienza lo bueno. La hora de desarrollar cada cuadro de la linea de tiempo. Normalmente, una linea de tiempo me toma unos seis o siete puntos de importancia, y mi meta es ir desarrollando cada punto poco a poco, y hacer las transmisiones de punto a punto sin apuros. Para esta parte me tomo mi tiempo porque debo extender, y también por que todo se encuentra sujeto a cambios. Incluso es posible que en medio del desarrollo de un punto importante no pueda con la transición al siguiente punto y me quede estancada. Por días, semanas, y meses sin una forma de seguir. Muchas historias, también, se encuentran detenidas por esta otra circunstancia. Y así, muchas otras por distintas razones que si comienzo a explicar, no terminaría sin sentirme abrumada y decepcionada. Son más las historias en espera que las terminadas, para mi triste fortuna. (Ahora que lo pienso, este proceso es muy malo y nadie debería seguirlo).
Es muy difícil llegar a un final con el que me sienta contenta y que al mismo tiempo lleve igual calidad que todos los capítulos anteriores, ya que al comenzar con una historia, puede que no termine teniendo el mismo estilo que cuando comencé. Me explico, es muy difícil mantener un estilo, no mejorar o cambiar con el tiempo. Y como me toma bastante viajar de un punto inicial a un punto final, es inevitable sentir que cambie en alguna forma. Comienzo una idea a principios de Enero, y al terminar por Mayo con toda la historia, ya he cambiado en alguna forma mi forma de escribir. Quizá aprendí algo, quizá siento que no hace falta hacer otras cosas, y para cuando termino, sentir que todo esta coherente e igual, es difícil. También es difícil explicar esta parte.
Este es, en lineas muy generales, mi raro - y no tan buen- proceso. Muy confuso y poco practico seguramente, como yo. Antes, hace un par de años, ni siquiera tenia una mínima idea de como escribir, solo lo hacia sin sentido alguno. No había ningún tipo de plan, y el resultado era muy malo. Ahora, siento que hay mejoras (muy considerables). Aunque aun no me encuentro en el punto que quiero y siento que podría estar. Este es un tema que personalmente me interesa, me gusta saber y ver como otros llevan este trabajo en sus formas personales. Siempre trato de leer artículos de este estilo para tomar costumbres y tips de escritura que me ayuden, por que sé que me falta mucho por recorrer hasta obtener lo adecuado, así que si luego aprendo algo que me funcione en la practica para mejorar, les comunicaré con mucho gusto. ¡Nos vemos en el siguiente post!