¿Es mi decisión la más acertada?

Comparto con ustedes un artículo que hace un tiempo escribí para una Revista, espero lo disfruten :)

Para nadie es una sorpresa la situación actual que se vive, no solo a nivel mundial con situaciones cada vez más difíciles para la subsistencia, en especial en nuestro país donde cada vez es más común el conformismo, la habituación, irritabilidad, fatiga y un incremento de estados melancólicos que en ocasiones desencadenan en depresiones, poca tolerancia, predisposición en las relaciones interpersonales. En ese momento es cuando se debe pensar ¿qué sucede? ¿Cómo se ha llegado a esto? ¿hay esperanzas posibles en este panorama? y la respuesta es, depende de si se tienen creencias firmes y Fe madura en la existencia de un ser superior, Dios creador. Parece algo tan obvio y directamente proporcional el hecho de que si se acerca a la fuente de vida, de amor Dios creador con convicción, entonces se tendrá mayores esperanzas y verás la vida de otra manera, lo que a veces sucede es que no es tan sencillo y requiere de constantes decisiones y arduo trabajo.

Dios nos ha dado la libertad para elegir y decidir.  A lo largo de la vida siempre hay que tomar decisiones, en estas decisiones debemos tomar en cuenta nuestra realidad, nuestras debilidades y fortalezas. 
 Lo importante es hacer la mejor elección posible, tomando en cuenta que siempre tendrán un “margen de error”, para ello muchos han sido los pasos que a lo largo de los años se han propuesto para evitar al máximo errores en la decisión,  por ejemplo tal como plantea la psicóloga Peruana María Salazar se pueden tomar una serie de pasos comenzando por  detenerse o hacer un stop en la vida para tomar decisiones con la menor impulsividad posible; reflexionar los pro y contra, elegir la opción que se considere más indicada, comunicar la posible elección con personas cercanas que conozcan la realidad que vivimos para poder ejecutar o colocar en marcha la opción escogida una vez analizada. 

(Imagen tomada del buscador google)

    Cada uno de los pasos que se sigan para la toma de decisiones debería ir de la mano con la Oración constante pidiendo la acción del Espíritu Santo para que con sabiduría se elija la decisión más indicada  y tener la humildad y perseverancia para que si al concluir la elección no es la más indicada, poder nuevamente comenzar este proceso e intentarlo de nuevo.

 Este proceso para la toma de decisiones puede aplicarse en todos los ámbitos de la vida, en especial sería muy bueno ponerlo en práctica para poder elegir la actitud más conveniente para afrontar la situación actual de nuestro país, la  decisión  por la que se optará como Católico  para salir adelante,  pudiendo elegir entre la inclinación por una visión de “fatalismo”, donde todo es tragedia sin esperanzas, o por el contrario se elegirá una postura realista pero con mayor esperanzas para vivir esta situación, manteniéndose firme y dando lo mejor de sí en cada momento. Si la opción es el “fatalismo” lo más probable  es que la Fe aún no sea madura, no sea convincente pues reflejaría un “si confío en ti pero no del todo” refiriéndonos a la acción de Dios en nuestras vidas, además demostraría una visión de túnel donde lo único que veo es “todo está mal”, olvidando las pequeñas alegrías de la vida en especial el saberse amado por Dios a pesar de no merecerlo.

  Pensemos que decisión estamos tomando, que actitud estamos eligiendo,  cuantas veces al día se dedica a la queja por la escases, por la delincuencia, y cuanto tiempo se dedica a agradecer a Dios por los momentos hermosos de la vida: poder ver un nuevo amanecer, tener un hogar, compartir momentos especiales con seres queridos, el nacimiento de un familiar, una buena conversación, el amor, la alegría, la risa, vivir la Eucaristía y cada alegría personal que aumenta nuestra autoestima y que no necesariamente son aspectos tangibles. Reflexionemos en donde se está colocando las esperanzas, la idea no es ignorar la realidad, si no tomar en cuenta que haciendo partícipe principal a Dios en nuestras vidas la realidad por fuerte que sea, se vuelve más manejable, nos permite encontrar otro sentido a la vida y a tomar decisiones mejores para aumentar el bienestar personal, integral y social de cada uno y lo más importante para obtener la fuerza para su puesta en práctica así sea contracorriente.  

Lic. Isaura Goncalves
Psicólogo Clínico

Les dejo el link de la revista para que puedan revisarla :D
https://revistakerigmavenezuela.com/