Un viaje es una experiencia de aventura, lamentablemente pueden no ser tan buenas las experiencias algunas veces. Recorrer cada pueblo hasta pisar Merida, es una aventura esplendida, puesto que atraviesas por todo el corazon de la coordillera andina. Se disfruta de una gran variedad de paisajes, hasta que llegas a la imponente coordillera andina, donde todos los chakras y los mantras se alinean dejando la mente y el espiritu reposar sobre tal majestuosidad.
Totalmente, desde los páramos hasta la lluvia casi perpetua es algo verdaderamente increíble de sentir y contemplar, esperó volver pronto!!