Miedo... Un mundo confuso - Relato -

Me levanto a las tres de la madrugada, me había quedado dormido en el sofá. Está todo completamente oscuro, la pantalla de mi laptop se ha apagado. La espalda me duele de haber dormido en ese sitio tanto tiempo. Me dirijo al pasillo utilizando la luz de mi pantallla y la memoria del camino hasta llegar a la puerta de mi habitación.

Abro la puerta, pero mi habitación no está allí. Veo lo que parece ser otra estancia, otro lugar, pues no hay ningún cuarto en mi casa como ese. Un cuarto lleno de ropa, oscuro y sucio me recibe, con dos colchonetas a cada lado. Recostado sobre una de ellas está lo que parece ser un vagabundo, completamente cubierto de harapos repugnantes como el resto de la habitación.

Yo ni siquiera cierro la puerta, sino que simplemente me encorvo y fijo la mirada en el suelo, asustado, y me alejo un poco. Entonces, escucho una voz grave y rasposa que me dice: "Cierra la puerta".

Al mirar hacia arriba, el vagabundo estaba parado justo frente a la puerta, completamente erguido, sin embargo, no podía ver su rostro pues estaba cubierto por sombras que no entendía.

De inmediato entro en pánico y camino hacia atrás, sin ver a mis espaldas, y me alejo del pasillo. Al detenerme, veo que la habitación desaparece ante mis ojos, y simplemente queda el pasillo sin puerta en aquel sitio.

Regreso corriendo hacia el mueble de donde había venido y me siento en él con los pies en el asiento. Las rodillas cubrían la mitad de mi cara. Y mi laptop la puse al lado mío. Cerca de mí y del mueble se hallaba una ventana que conectaba directamente con el parque de atrás, que estaba completamente oscuro.

De repente, empiezo a escuchar pasos que venían de afuera. "No quiero que me vea..." pienso, pues ya sé quién es él.Él observa lo que hay dentro de la casa. Asegurándose de que esté dormido en mi habitación. de modo que apago la pantalla de mi laptop y la traigo conmigo de inmediato hacia debajo de la ventana. Todo se queda en completa oscuridad mientras espero aterrado allí, en mi posición predilecta, con las rodillas cerca de la cara y los brazos abrazándolas.

Los pasos se oyen al lado de mi ventana y se detienen. Él mira con atención toda la casa. Cualquier movimiento en cualquier momento, él lo oiría. Me vienen a la memoria las veces que asesinó a mi hermana, cada herida peor que la otra. Siempre las cuento, las horas que se queda, ésta vez se quedó una, hasta después de varias horas.

Él se va, eso me deja mucho alivio. Me recuesto con más tranquilidad en ese sitio.

Repentinamente, la sombra que está en la esquina de la pared, que no tiene forma, se extiende y hace emerger un brazo con un cuchillo de sombra y me apuñala...

Mi sangre empieza a caer hasta desbordar el teclado de mi laptop y luego esparcirse por todo el suelo. Caigo al piso y mi sangre empieza a empaparme. Me desmayé.

Me despierta la voz de mi madre diciendo: "Hijo, ¿Qué haces aquí?". Al abrir los ojos, es de día. "Me apuñalaron" le digo. Ella me mira con escepticismo y fastidio y me responde: "¿Te apuñalaron?".

Entonces se acerca a mí hasta estar enfrente de mi cara, y sus manos empiezan a transformarse en largas y horribles garras color carne y sus ojos empiezan a brillar rojo fuerte. "¿Quieres sentir que te apuñalen de verdad?" pregunta, mientras me ahorca y me perfora y hace borbotar sangre en la garganta.

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