Pero no se puede negar una realidad, es que ya ellos estaban inmersos en el mundo digital, de la información (cabe preguntarse ¿cuál información?, de paso no controlada por mi) todos tenían celular y si te descuidabas no había clase se perdían en el mundo del chat y de los mensajes y la música o que se yo todo un caso de indisciplina por no prestarte atención (se pierde el control sobre los estudiantes), pero aceptar que eso era el resultado de una clase aburrida y fuera del contexto de los alumnos es muy duro para un docente (es tu clase ¿sabes?, y es ¡la mejor!); pero dentro de la teoría de la complejidad y de los sistemas, eso es normal que ocurra porque ellos están decodificando el mundo, están definiendo como caracterizarse y como caracterizarlo están interactuando, construyendo su modelo y recontruyendolo sobre lo que se vive e incorporando esa experiencia de forma que en el instante siguiente o si obviamos el tiempo en el cuadro siguiente se tiene una realidad nueva que atenta contra el concepto de estable o lo que nosotros como rectores del asunto consideramos que debe ser.
En definitiva, para mí, si consigues que logren centrarse, focalizarse, dirigir sus acciones sobre un norte pre establecido entre tú y ellos sobre un tema o proyecto en particular, no importa la apariencia de lo que se mire, hay disciplina y las tecnologías de la información per se no van a conseguir eso sin un leitmotiv; quien a mi juicio logra, al final, crear un clima de orden dentro del caos del día a día de las clases es el prestigio que un docente pueda conseguir entre sus alumnos manejando o aproximándoseles con una relación de iguales, de comprensión y de respeto.
Le dejo como cita el siguiente párrafo
“Control
Los sistemas caóticos son muy flexibles. Si tiramos una piedra al rio, su choque con las partículas del agua no cambia el cauce del rio, sino que el caos se adapta al cambio. Sin embargo, si el rio hubiese sido creado por nosotros con un orden artificial, donde cada partícula de agua tuviera una trayectoria determinada, el orden se hubiera derrumbado completamente. El caos, en realidad, es mucho más perfecto que nuestro orden artificial: hemos de comprender el caos y no intentar crear un orden rígido, inflexible, cerrado a la interacción con el medio.
Siempre hemos estado obsesionados por el control, creemos que cuantas más técnicas creemos, mas control tendremos sobre el mundo. Pero en cada tecnología nueva que introducimos se nos echan encima un montón de problemas, para cada uno de los cuales hemos de inventar nueva tecnología. Si tiramos una piedra en el rio que estamos tomando como ejemplo, el cauce no cambia, pero si tiramos una roca gigante la flexibilidad del sistema no será suficiente. Es lo que ocurre en la tierra: es un sistema caótico, siempre cambiante y adaptándose, pero si nos pasamos el sistema cambiara impredeciblemente o colapsara. Un ejemplo son los problemas con la capa de ozono, el aumento de la temperatura global y el deshielo, problemas con los recursos como el petróleo. Etc.
Aprender a vivir en el caos no significaría no significaría aprender a controlarlo, ni a predecirlo. Al contrario, hemos de enfocar la cuestión desde el punto de vista de que nosotros también somos parte del caos, no nos podemos considerar como elementos aparte. Desde esa perspectiva lo que podemos hacer es vivir de la creatividad del caos, sin intentar imponernos, si conseguimos realmente formar parte del sistema, el concepto de sujeto y objeto desaparecerán, con lo cual el problema del control sobre un objeto, también.“
Articulo Teoría del Caos Boyan Ivanof Bonev (Pag 8)
Gracias por leer mi publicación