1- HECHOS 9:4

4 y cayendo en tierra, oyó una voz que le decía: Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues?

2- HECHOS 22:7

7 y caí al suelo, y oí una voz que me decía: Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues?

3- HECHOS 26:14

14 ...oí una voz que me hablaba, y decía en lengua hebrea: Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues? Dura cosa te es dar coces contra el aguijón.

• HECHOS 22:9 registros adicionales:

9 Y los que estaban conmigo vieron a la verdad la luz, y se espantaron; pero no entendieron la voz del que hablaba conmigo.

El Señor Jesucristo es el examinador del corazón. Leemos en APOCALIPSIS 2:23 estas palabras de Jesús

23 ...yo soy el que escudriña la mente y el corazón;

Esta fue una cita de Jeremías 17:10 que dice:

10 Yo Jehová, que escudriño la mente, que pruebo el corazón,(A) para dar a cada uno según su camino,(B) según el fruto de sus obras.

Cuando Saulo de Tarso estaba exhalando amenazas y matanzas contra los discípulos del Señor, realmente estaba exhalando amenazas y matanzas contra el mismo Señor. Saulo de Tarso probablemente no sabía las palabras de Jesús pronunciadas en MATEO 25:40.

MATEO 25:40 De cierto os digo que en cuanto lo hayas hecho a uno de estos mis hermanos más pequeños, me lo has hecho a mí.

Mientras estaba en el camino a Damasco, Jesús llegó a su límite con el viejo Saulo de Tarso, y vino y se apareció a él y le hizo esta pregunta que se encuentra en HECHOS 9:4, 22:7 y 26:14

... Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues?

Esta fue una pregunta penetrante. Saulo de Tarso sabía por boca de mártires como Esteban que realmente estaba persiguiendo al Señor, de lo contrario, ¿por qué Saúl en este momento no hizo la pregunta?: "¿cuándo te perseguí Señor?" Más bien, Saulo de Tarso hace esta pregunta al Señor registrada en HECHOS 9:5, 22:8 y 26:15:

“¿Quién eres, Señor?”

Jesús responde la pregunta de Saulo de Tarso en estos mismos tres versículos, y HECHOS 22:8 lo registra así:

Yo soy Jesús de Nazaret, a quien tú persigues.

Esta simple respuesta del Señor respondió por completo cualquier duda que Saulo de Tarso pudiera tener sobre quién era él que le estaba hablando.

Entonces Saulo de Tarso creyó, y después de invocar al Señor, le hizo a Jesús esta segunda pregunta registrada en HECHOS 9 y HECHOS 22.

HECHOS 9:6 Y temblando y asombrado dijo: Señor, ¿qué quieres que haga?
HECHOS 22:10 Y dije: ¿Qué haré, Señor?

Esta fue una declaración de fe, porque en ese momento Saulo de Tarso se salvó, cambiando así su vida para siempre. Es por eso que con plena seguridad de fe, años más tarde el Apóstol Pablo pudo escribir con pleno conocimiento y de primera mano.