Buenas tardes hermanos y amigos, hoy en este post seguimos con el estudio titulado "EL NO SER SANTOS" . Para que pueda comprender mas esta parte dejo el link de la parte anterior. Dios le Bendiga y que el Espíritu Santo lo guié.
https://steemit.com/spanish/@pdc/el-no-ser-santos
Cualquiera sabe que servir en la casa rosada no es lo mismo que servirle al presidente, tal vez nunca lo vea al presidente. Son dos cosas diferentes, si ud quiere tener acceso a las comodidades del palacio, tiene que hacerse amigo del rey, tener acceso y comunión con el rey. Es lo que le pasó a Ester, la Biblia dice en Ester 5:2-3:
“Y cuando vio a la reina Ester que estaba en el patio, ella obtuvo gracia ante sus ojos; y el rey extendió a Ester el cetro de oro que tenía en la mano. Entonces vino Ester y tocó la punta del cetro. 3 Dijo el rey: ¿Qué tienes, reina Ester, y cuál es tu petición? Hasta la mitad del reino se te dará”.
¿Por qué te daré la mitad del reino? Porque Ester había accedido a la presencia del Rey. Es decir, para obtener las comodidades del palacio, el favor de Dios en nuestra vida, tenemos que tener comunión con Dios, tener acceso con el rey. Pero ¡¡¡ojo!!! No podemos tener acceso al rey si no estamos santificados, porque el rey no recibe a quienes no se santifican previamente.La única forma de tener acceso a la bendición, a la presencia, a las comodidades del palacio, es mediante una relación con el rey. Pero el rey no nos recibirá a menos que estemos santificados.
¿Se acuerda de Josué? Debido a su obediencia Dios lo protegió frente a las acusaciones que satanás hacía en su contra. Pero no fue sino hasta el momento en que el ángel mudó sus ropas sucias, que Dios le dijo: “ahora puedes entrar libremente a mi templo como hacen los demás ángeles que están aquí en el cielo”. Dice Zac 3:7“Así dice Jehová de los ejércitos: Si anduvieres por mis caminos, y si guardares mi ordenanza, también tú gobernarás mi casa, también guardaras mis atrios, y entre éstos que aquí están te daré lugar”. Josué fue protegido porque la obediencia le da protección. Pero es la santidad la que le da acceso a la comunión con Dios. Santidad, sin la cual nadie verá a Dios, sin excepción.
Dios no va a tolerar que aquellos que pretenden acercarse para servirlo, lo hagan con las ropas sucias. Podrás servir al pueblo de Dios, pero no a Dios. De ahí que tantas personas confunden y creen que como están sirviendo en las cosas de Dios o están haciendo algo para Dios, tienen el favor de Dios. Podrían estar bajo cielos cerrados, sus oraciones podrían no ser escuchadas ni contestadas, simplemente porque pretenden servir y acercarse al Señor con las ropas sucias. ¿Sabe qué es lo más triste?
Que hay creyentes que se conforman con lo uno, sin pretender lo otro.Se conforman con servir en el templo haciendo cosas para Dios, en la iglesia o afuera, sin alcanzar la comunión con el Señor, que es el privilegio más grande.
Acceder a la presencia de Dios fue el privilegio más grande para los sacerdotes que no comprometieron su santidad Ez 44:15-16 dice:“Mas los sacerdotes levitas hijos de Sadoc, que guardaron el ordenamiento del santuario cuando los hijos de Israel se apartaron de mí, ellos se acercaran para ministrar ante mí, y delante de mí estarán para ofrecerme la grosura y la sangre, dice Jehová el Señor. 16 Ellos entraran en mi santuario, y se acercaran a mi mesa para servirme, y guardaran mis ordenanzas”.A los que lo abandonaron, Dios les permite seguir sirviendo en el templo, al pueblo, pueden matar animales, pero no les permite acercarse a Él, porque despreciaron y descuidaron la santidad.
Este mensaje es un bálsamo para aquellas personas que luchan por mantener su integridad y su santidad en medio de un mundo corrompido. Jóvenes y no tan jóvenes que luchan en su aula de clase, en su trabajo, en sus casas, por mantener la integridad y la santidad. Seguramente el diablo ya te ha visitado y te ha hecho pensar en todas las cosas que te estás perdiendo, entre comillas, por vivir consagrado a Dios. Seguro el diablo te ha hecho pensar: “para qué cuidar la santidad cuando aquel que la descuida, mirá lo bien que le va”. El mundo nos bombardea con mensajes estimulantes para que abandonemos nuestra posición de consagración y de santidad.
Para colmo, hay algunos , que se acercan a esas personas que están consagradas a Dios y les pretenden hacer creer que hay bendiciones que se pierden. Como por ejemplo: el de tener una familia, por el solo hecho de vivir consagrados a Dios y a su obra. ¿Cuántas veces te han hecho creer que estas soltero o soltera y no puedes tener pareja y familia, porque vives consagrado a Dios y a su obra? Para esas personas les recuerdo la promesa del Señor en Ez 44:15-16 “Estarán en mi presencia y se acercaran a mi mesa para servirme”. El mayor privilegio, hermano, por mantener tu integridad, por estar consagrado a Dios, es acceder a la presencia del Señor, tendrás libre acceso a la presencia del Señor.
Saque sus propias conclusiones, ¿Va a escuchar al diablo, o a la palabra de Dios? Dios dice: “entraran, estarán en mi presencia y servirán en mi mesa”.Viva consagrado a Dios y no se arrepentirá. Luche por mantener su integridad en todas las áreas, su santidad sexual y no se arrepentirá. Dios no es deudor de nadie. Y aquellos que se mantienen en integridad, en santidad, lejos del pecado, Dios les promete acceso a su presencia y los demás que sigan trabajando.
Las personas que deciden mantenerse consagradas, no solo tienen acceso a la presencia del Dios, el privilegio más grande, sino que son de mayor utilidad para el reino de Dios. No caigamos en la trampa de satanás, su razonamiento es el siguiente: “si quieres ganar a uno de tus compañeros de colegio o del trabajo para Cristo, tienes que meterte en su mundo y adoptar sus prácticas y sus costumbres”. ¡¡¡Cuidado con ese evangelio!!! Jesús caminó entre pecadores, pero no se mimetizo con ellos, nunca comprometió su santidad a fin de sumar algún discípulo más entre sus seguidores. En ocasiones Él estuvo cerca del pecador, pero muy lejos de sus pecados, por lo que nunca comprometió la santidad.
Tampoco lo hizo la iglesia primitiva, que con su santidad, por ser diferentes, sacudieron las estructuras más sólidas del imperio más poderoso de todos los tiempos. Hoy el imperio romano es historia, pero lo que sucedió con la iglesia primitiva perdura a lo largo y a lo ancho de todo el planeta hasta el día de hoy y está vigente más que nunca.
Seguiremos este estudio el en próximo post.
Gracias por leer, comentar y compartir. Dios le bendiga.
Realmente disfrute mucho leyendo esta publicación, administro mi vida, siempre los pastores dice "Por estar haciendo la obra, no descuides la relación" "no trabajes tanto, ora mas" Espero mas contenido de esta cuenta @pdc ¡Éxitos y Felicitaciones!
Gloria a Dios por eso hermano, gracias por leer y comentar, sigamos estudiando, aprendiendo y haciendo lo que dice la palabra de Dios. Dios te bendiga.