Bitácora: Día 8 - Piel de Rinoceronte

Permítanme contarles un poco más de lo que ha sido mi vida estas semanas. Hace pocos días realice un taller intensivo cuyo objetivo era desarrollo de potencialidades del ser humano en cada ámbito de su vida. Pero como dicen los adagios populares “la vida te prueba de lo que ella misma te enseña”

Es por eso que he denominado la Bitácora de hoy como

“Piel rinoceronte”

¿Sabían ustedes que los rinocerontes tenían una piel gruesa? Cuyo objetivo obviamente es protegerlos del ataque de los animales que quieran devorarlos. Y los más asombroso de estos animales temibles a la vista, es que si no son provocados, son incapaces de matar a cualquier ser vivo pues se alimentan de plantas, flores y pasto, sin embargo estos cuadrúpedos son vulnerable ante el miedo y la persecución por eso al sentirse atacados se defienden con todas su fuerzas hasta derrotar al/los oponentes.

En teoría, así somos los seres humanos, fingimos tener una piel resistente ante cualquier ataque, pero en nuestro interior somos tan vulnerables, incapaces gobernar el miedo que diariamente toca nuestras puertas.
Debo admitir, aunque no fue fácil, descubrí, que mostrar cualquier tipo de emoción, afecto, sensibilidad puede ser garrafal. La gran mayoría de las personas suelen pensar que eres una persona “débil” cuando realmente no es así.
Mirando diferente libros de historia llegue a la conclusión que aquellas personas que llaman débil, son las que consiguen todo lo que se proponen, pues cuando sienten frustración la expresan a través de lágrimas y luego siguen como si nada hubiera pasado. Mientras aquellas que fingen rudeza suelen agobiarse por esos pequeños percances, dejando de luchar por aquello que estimaron.

Por eso debemos elegir, vestirnos de seda y no con un caparazón de rinoceronte. La arrogancia suele ser la perdición de los imperios más grandes, al ocultar nuestros sentimientos lo único que logramos es perder la oportunidad de amar.

No es fácil tomar esta decisión, lo sé mejor que nadie. No es sencillo quedar desnudo ante el mundo y sentirte vulnerable ante las críticas, la hipocresía y de cierta forma la falsedad de las personas, pero debo admitir, que al disponer en tu corazón vivir una vida libre de toda fortaleza pesada, te permitirá correr con mucha más facilidad a tu meta, ganando así tu carrera.