El sótano de Teresa McCourtney Parte IX

in #spanish6 years ago (edited)

DQmRTmomwLkGu2yEi1ek3RkHXUSQL8LKv2PSdZYufa6mgJt.png

PARTE IX

Coloqué el cuchillo entre sus manos y le indiqué dónde debía clavarlo, justo en el pecho de Greg, algunas perforaciones para provocarle la muerte.

-Hazlo, mátalo - Insistí - ¡Mátalo ahora!

Katherine lo hizo, clavó el cuchillo varias veces en el pecho de Greg, no lo miró mientras lo hacía. Retiré el cuchillo de sus manos y lo puse en mi bolsillo trasero, me agaché para recoger la grabadora, pero Katherine ya tenía el cuchillo en sus manos, a diferencia de Greg, Katherine no padecía de severos dolores, o al menos eso parecía, al verla levantarse tan rápido, me apuntó con él, y luego corrió por el pasillo, corrí tras ella y me lancé para impedir que avanzara, Katherine me pateó fuerte, la sujeté una vez más, y sus manos se movieron rápidamente, el cuchillo rasgó mi frente, la empujé, el cuchillo cayó y rodó unos centímetros, golpeé el cuchillo y lo alejé un poco más, volví a sujetar a Katherine, pero en medio de aquello y sin darme cuenta, ella ya había descubierto su boca, y mientras intentaba sostenerla por los brazos, me empujó y acto seguido mordió mi cuello, el dolor era terrible, no podía ponerme de pie, estaba perdiendo mucha sangre y muy rápido, puse mi mano en la herida y apreté fuerte, me arrastré y entré a su habitación, cerré la puerta, tomé la grabadora, escuché la puerta abrirse y cerrarse, unos minutos después el sonido de un auto colearse me hizo saber que ya estaba lo suficientemente lejos, até un trozo de tela a mi cuello, me levanté con mucho pesar, ya en el pasillo y sin fuerzas, me caí, e intentando no darme por vencida comencé a gatear, creí ver a Teresa al final del pasillo, fui hacia ella, el teléfono cayó de la mesa, sabía que había sido ella, estaba ayudándome, y tan pronto lo tuve entre mis manos marqué el número de la policía, y luego el de Jessica, le conté todo a la policía, pero les dije que había sido Katherine quien nos había tratado de envenenar a ambos, que yo en medio de aquello, busqué mi grabadora para dejar evidencia sobre el asesinato de mis padres antes de morir, la policía creyó mi testimonio, y en un par de horas Jessica estaba allí, sujetando mi equipaje.

Esa noche en la habitación de huéspedes del apartamento de Jessica, las escenas anteriores no me permitían conciliar el sueño, recordaba la mirada perdida de Greg, quizás al final si sintió remordimiento, pero era demasiado tarde para un perdón. A la mañana siguiente fui a la estación de policía, iban a tomar algunas declaraciones de nuevo, expliqué todo como lo había hecho antes, tomaron mis huellas y muestras de ADN, recordé el momento en el que puse apenas veneno en mi boca, sabía que ellos harían esto, así que la historia debía estar bien trazada, como el hecho de que jamás toqué los frascos de gasolina encontrados en la habitación, o que mis huellas en la cinta de Greg quedaron impresas cuando le rogué que me contase la verdad sobre mis padres mientras Katherine no se hallaba en la habitación. Les dije que el detonante de la actitud de Katherine fue mi imprudencia, le dije de mis sospechas y entonces Greg se inclinó por mi dolor y quería contármelo todo. Los agentes parecían estar convencidos, así que me dejaron marchar. Esa tarde tomamos un café antes de llegar a casa, una vez en casa, Jessica recibió una llamada del hospital, su novio había tenido un accidente, ella tomó todo lo que podía para llevarle y me pidió que me quedase, que no abriera la puerta a nadie. Recuerdo su rostro en ese momento, estaba llena de angustia y las lágrimas caían a cada paso que daba, coloqué mis brazos al rededor de su cintura.

-Estará bien Jessica. Vengan a casa pronto.

-Si. Lo prometo - respondió con un deje de angustia en su voz.

Jessica abrió la puerta, y la seguí con la mirada por todo el pasillo, dobló hacia la escalera y la perdí de vista, por un momento sentí un vacío, uno terrible, cerré la puerta, pero algo me molestaba, así que la abrí nuevamente y corrí por el pasillo, bajé las escaleras, y cuando me dirigía al estacionamiento, escuché un grito, un golpe, el sonido de la fricción de los neumáticos contra el suelo, cuando abrí la puerta, allí estaba Jessica, salía sangre de su boca, y no podía moverse...

Continuará....