Nueve meses, nueve meses donde toda mi vida la arme en dos maletas y me fui a probar suerte con mi hermano en otro país.
Estar en este punto y hacer un repaso de todo lo que ha pasado me pone nostálgica, por una parte son nueve meses donde no he podido ver a mis padres, donde me hace falta un abrazo de mi madre y hasta puedo decir que extraño las peleas con mi padre; donde he tenido que aprender a dar cariño y recibirlo a través de una pantalla.
Igualmente, no todo es malo; estoy agradecida por este lindo país, por abrirme las puertas y porque la mayoría de su gente nos entiende y nos trata bonito. Por la gente maravillosa que he logrado conocer acá y me ha tendido una mano amiga, agradezco tener a mi hermano y poder sentir el abrazo de un ser querido, poder lograr cosas que en mi país probablemente no lo hubiese podido lograr.
Creo que una de las cosas que mas he aprendido en este viaje es el poder desprenderme y no tomarme todo tan personal, darme cuenta que si caemos debemos levantarnos y debemos luchar por nuestros sueños; creo que esto es lo que se llama adultez, porque así no tengamos ni puta idea de como va a ir todo no podemos frenar; así que solo nos queda dejar de reprocharnos por momentos malos y disfrutarnos este viaje, con sus altibajos, con sus detalles y sus bellos paisajes, no nos queda mas que hacer que esta vida valga la pena.
todo lo que has pasado te ha dado un nuevo aprendizaje apreciar lo que dejaste y valorar mas a las personas a tu lado. se esta construyendo un nuevo individuo @marienesmaza