"¿Dónde estás?"

Ya he llegado a olvidar lo que es sentir afecto físico de otra persona. Pero no cualquier afecto físico, no.

Brazos rodeando mi cuerpo, con mucha fuerza. Un abrazo, uno de esos que son tan especiales que olvidas la existencia del resto del universo. Uno de esos que quieres que sea eterno. Pero cuando termina te das cuenta que fue algo simplemente efímero.

Pero tienes que disfrutarlo. No sabes si será la última vez que sientas algo así.

"¿Cuándo fue la última vez que sentiste un abrazo tan real?" -me pregunté. Y en realidad, no puedo dar una respuesta cien por ciento sincera, porque no lo recuerdo.

Pero sí recuerdo como se siente, y lo extraño. Por más que haya buscado otros brazos que me hagan sentir tan bien como los suyos, no encuentro ese calor, ni ese afecto, que, a pesar de que pueda ser sólo un abrazo, la sensación varía con los sentimientos e intenciones de la otra persona.

Entonces, ¿dónde están los brazos que podrán hacerme sentir bien otra vez?