Regálame una sonrisa, que sea:
diáfana, cómplice y viajera,
estación de luz en tiempo de invierno,
lluvia torrencial cuando el otoño
marque con su aridez mi tierra.
Que sea el reflejo de tu alma,
de la avidez que surca en sueños
los vacíos infinitos de la nada,
un remanso entre la furia del río
y la imponencia de los destinos.
Regálame una sonrisa, que sea:
día y noche, y trascienda al mañana,
que alcance con su frescura el alba,
que despierte con su elocuencia
al mas dormido de los fantasmas.
Una mezcla de paz y locura,
que lleve en su equipaje la ansiedad
de los momentos que no transcurren,
el delirio del erotismo que embriaga
el rojo fuego de los labios pintados.
Fuente de la imagen
Buen post
Gracias por leerme.
Hermosa poesia yo tambien escribo a veces poesia, buena calidad mis respetos y mi apoyo.
Gracias por leerme.