Debemos aprender a orar, pues mientras más entendamos lo que dice la Biblia sobre Dios y sobre la oración, mejor oraremos, y durante la oración correcta y que agrada realmente a Dios, nuestros corazones serán cambiados para entender mejor cómo obra Dios en nosotros y a nuestro alrededor.
Jesús dijo: “Y todo cuanto pidáis con fe en la oración, lo recibiréis”. (Mateo 21:22).
Y el libro de Santiago dice:
“Pero que la pida con fe, sin vacilar; porque el que vacila es semejante al oleaje del mar, movido por el viento y llevado de una a otra parte
A veces pedimos por los motivos equivocados. El libro de Santiago dice, “Pedís y no recibís porque pedís mal, con la intención de malgastarlo en vuestras pasiones”. (Santiago 4:3)
A veces nuestra solicitud no puede ser concedida por el daño que podría causar a terceros
Se puede caer en la trampa de pensar que Dios solo debe oír lo que nosotros le pedimos, que somos lo más importante en la agenda de Dios. Pero nos hemos detenido a pensar la cantidad de seres que habitan el mundo y lo que todos le piden a Dios. Aunque Dios siendo, omnipotente y poderoso, puede oír las peticiones de todos sus hijos, pero la biblia advierte que Dios no oirá la voz, se hará el sordo, ante aquellos que desobedezcan sus leyes y que no oigan y desconozcan su palabra
Juan 9:31
Sabemos que Dios no oye a los pecadores, pero si alguien teme a Dios y hace su voluntad, a este oye.
Pidámosle a Dios salud por sobre todas las cosas, que eso es lo que primariamente necesitamos para poder trabajar y obtener el pan de Cada día. Amén.