Hola, les dejo a continuación mi ejercicio, espero que les guste.
Hoy, como todas las noches, me levando de mi cama a dar un paseo nocturno. Veo las casas en la oscuridad y siempre me da intriga saber que historias guardaran cada una de ellas.
Camino por las calles desoladas y me invade una inmensa paz, de vez en cuando que pasa un vehículo pero después de que pase vuelve la calma. Me encuentro aveces a un perro callejero y lo saludo como si fuéramos amigos de siempre.
Después de unos cuantos minutos caminando regreso a mi casa y entro con el mayor silencio posible, tratando de no despertar a mi esposa e hijas que duermen tranquilamente.
Camino hasta mi habitación y mientras cierro la puerta ésta rechina y mi amada se despierta asustada. Le digo que soy yo, como todas las noches. Y ella se calma, sabe que todo las noches salgo a caminar.
Al entrar cierro la puerta y me acuesto a su lado, estaba llorando mientras decía antes de dormir:
-Quisiera que estuvieras una vez mas aquí mi vida-
Y, como todas las noches, entro en sus sueños para poderla ver, abrazarla, decirle lo mucho que la amo a ella y a mis hijas. Siempre quedamos horas conversando hasta que la alarma del trabajo me la arrebata y nos sustrae a los dos de su sueño.
-Mi vida, si supieras que le pedí a Dios quedarme contigo para cuidarte, que renuncie al cielo por ahora para verte a ti y a mis hijas crecer, cuanto las amo-
Johanatan, ¡qué gusto leerte!
Excelente temática, interesante. Me gustaría seguir leyendo.
Quizá como sugerencia evitaría el presente continuo para narrar. Recuerda que tratamos de simular la realidad como escritores: volver verosímiles nuestros relatos. Si buscamos imitar la forma de pensar en una persona/protagonista, el presente enumerativo es una forma muy poco real de narrar-nos historias en nuestro flujo de pensamiento.
Quizá no le vendría mal a la historia que la transformaras hacia el pasado.
Es un granito de arena, tómalo si te sirve.
Abrazo,
D.
Hola, muchas gracias por su comentario y apoyo, todas sus sugerencias siempre influirán en mi de manera positiva. No respondí antes por que no había visto el comentario, disculpen la tardanza.
Un gusto, aunque hablamos de uno a uno.
Me llamo Daniel y es un gusto.
D.