Venezuela: A mi no me lo contaron.

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En Venezuela la situación no es la más bonita del mundo. La inseguridad, la escasez y el alto costo de la vida arremeten a diario contra los venezolanos que intentan sobrevivir en un país que va de mal en peor. Los medios locales desinforman y transmiten información falsa a la población y a las personas en el exterior, los cuales son la razón por la que hago este post. Se ha hecho un hábito en mi vida leer y escuchar a gente de todas partes del mundo hablar de la situación venezolana como si fueran expertos o dueños de la verdad. Leo a diario como dicen que todo es una exageración, que no es para tanto; ¿en qué se basan? Pues en lo que el medio de turno supuestamente informó.

Es muy normal leer comentarios en el Internet de algún desubicado diciendo que si tenemos un teléfono, tan mal no estamos; o que al tener acceso a Internet vivimos una democracia, y en algunos casos hasta se atreven a comparar nuestra situación con alguna que su nación vivió en el pasado. Por ejemplo, digamos que entras en una comunidad que funciona por plazos, me refiero, para hacer una determinada actividad tú acuerdas con alguien hacerla en un determinado día y hora, pues es aquí donde aparece el problema. Estos individuos del supuesto 'primer mundo' no logran entender cómo alguien puede tener problemas con el Wi-Fi o que un apagón interrumpa el correcto desarrollo de lo planeado en medio siglo XXI; y es que claro, ¿cómo alguien acostumbrado a tenerlo todo puede comprender a alguien que no tiene nada? Otra situación que se da a menudo es alguien de España, por ejemplo, dice que vio en un canal importante un reportaje que explica que los venezolanos tienen el salario más alto de Sudamérica y que, por consecuente, poseen una gran capacidad adquisitiva. Es aquí donde veo lo absurdo, dicen algo estando a kilómetros de distancia basándose en lo que un medio supuestamente profesional dijo.

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El punto más grave de todo esto es escuchar a un extranjero quejarse de lo que tiene. Escucho a un argentino decir como su difícil situación económica lo afecta sumado a la gran corrupción de parte del gobierno. En su burbuja dicen que viven una crisis, una situación de la que no pueden levantarse y que ya es merecedora de cambio de gobierno. Luego de decir eso, vienen con su cara muy lavada a hacer lo mencionado en el anterior párrafo. Yo quiero que cuando alguien diga que su Internet 'sólo' descarga a 5 MB por segundo recuerde que hay quienes bajamos un documento a 2 KB/s. Cuando digan que su salario es insuficiente sepan que hay otros que lo gastan en comprar pan, queso y leche para cinco días. Yo deseo que la gente valore lo que tiene y respete a los que no, sin criticar y ser escépticos sin haber vivido la realidad.

Como dije anteriormente, en otros países se quejan de que su conexión es lenta, pues aquí hay personas que tienen que hacer sus responsabilidades en la madrugada porque en el resto del día es sencillamente imposible. Un hombre normal en Venezuela gana aproximadamente 800.000 bolívares al mes, de los cuales sólo 250.000 representan el salario mínimo. Es por esto que yo me pregunto: ¿Quién diablos puede vivir así? ¿Quién mira su cuenta bancaria y siente que le basta? Muy pocos. Vivimos en un país en el que si quieres renovar tu cédula tienes que marañar (este es un término venezolano que representa hacer un acto ilícito para obtener algo a cambio), en el que si necesitas un poco de efectivo tendrás que pagar al 200% vía transferencia— osea, si quieres 100 bolívares en efectivo, tendrás que pagar 300 por la banca electrónica —, una nación corrompida en todo sentido y mirada con escepticismo a nivel mundial.

Para terminar quiero agregar que me parece una falta de respeto leer o escuchar cualquiera de las cosas dichas anteriormente. Si algún extranjero quiero sentir la dura realidad venezolana venga un mes a vivir aquí sin sus euros o dólares y verá como simplemente se estrella. Lo que ocurre aquí es una realidad, a mi no me lo contaron, yo lo vivo, así que no venga nadie a decirme que lo que aquí pasa es una exageración. Si a ti no te importa mi país, mi Internet o mis problemas pues a mi no me interesa tu libertad de pensar eso; muy bien por ti que vives en ese mal llamado primer mundo, pero deberías entender que no todos corren esa suerte y sobretodo saber que algún día te podría pasar lo mismo y que lo menos que querrás es que el mundo te llame exagerado.