La cruda realidad es que a pesar de que la torta alcanza para todos no siempre es distribuida equitativamente, siempre existirá una persona que comerá más de la cuenta.
Y es completamente normal; Vilfredo Pareto, un hombre con altos conocimientos en el área de economía lo anunció en el año 1896 al descubrir que el 80% de las tierras en Italia pertenecían solo a un 20% de la población y así se repetía en otros países con circunstancias distintas o porcentajes ligeramente diferentes pero era visible un patrón solido y consistente, se conoce hoy en día como la regla 80-20 causando sensación para el momento.
La mayoría de los recursos siempre es controlada por una cantidad limitada de personas. Pasa lo mismo en la naturaleza, de las vainas de algún grano sólo un pequeño numero de vainas dará la mayor cantidad de granos.
Sucede lo mismo en deportes, con empresas y por supuesto en capital humano. Desde pequeños sabemos que en el colegio siempre hay un estudiante que saca sus A+ sin problema y ni siquiera lo vemos ajetreado. Él pertenece a ese pequeño porcentaje y que entremos en ese porcentaje no sólo se atribuye a nuestro esfuerzo, por supuesto que sí una gran parte pero contamos con circunstancias ajenas que nos retrasan, incluso sin darnos cuenta.
Pregúntate ¿Por qué? y te responderé que es más sencillo de lo que crees.
Se llama principio de la ventaja acumulativa y no va más allá de que una ligera ventaja al comienzo de la competencia marca completamente la diferencia del resultado. Robert. K Merton expresa como los científicos que conseguían más publicaciones al inicio de su carrera conseguían un mayor éxito que sus colegas al estar en etapas más avanzadas. O si entre dos arboles de especies distintas compiten por la luz del sol, el que crezca un poco más rápido tendrá la ventaja absoluta y no tardará demasiado para opacar a su competidor, privarlo de la luz del sol y de los mejores nutrientes.
Vamos a simplificar esto por si todavía no me sigues del todo, son recursos y es que de eso trata todo, es una ardua competencia donde día a día todos quieren ser los mejores de su área; al final pocos se quedan con la recompensa por la que todos luchamos. Son números y si crees que no son importantes dile eso a un deportista profesional para que veas como su expresión cambiará de repente.
Lo expliqué en mi post pasado con un ejemplo muy sencillo. Si dos personas compiten por el mismo trabajo y uno de los dos demuestra estar mejor preparado, tal vez con un idioma encima, estoy seguro de que la empresa escogerá a ese que lleva ventaja, por corta que sea.
¿Qué opinas de este interesante principio? ¿Quisieras agregar algo al respecto? !Deja tu comentario y nos leemos en la próxima!
Ciertamente es un postulado interesante aunque en cierta forma me resulta un poco perturbador e inquietante desde su practicidad si de forma aislada se trata. Mi punto es relativo al hacer ventaja olvidando o descuidando el resultado final y al ambiente donde lo vas a ejecutar; es decir, si bien, en definitiva estoy de acuerdo que aprovechar el primer impulso puede marcar la diferencia para el máximo aprovechamiento de los recursos disponibles, considero que también es necesario crear una estrategia para no agotar toda la energia antes de finalizar. Por ejemplo, de que le sirve a un corredor dedicarse en velocidad a ser el primero durante los primeros kilómetros si en los últimos kilómetros desfallece y los demás lo superan? O iniciar una carrera sin previsualizar la ruta, sus rivales, el clima para ese día o hasta que ropa debe usar? Como crea una estrategia si desconoce a que se va a enfrentar?. El crear la ventaja va más allá de ir más rápido, sino administrar su energía para finalizar a la delantera (O al menos es mi opinión). En lo laboral he conocido infinidad de personas que al inicio eran competitivos en cuanto a su preparación pero luego entraron en zona de confort y dejaron de prepararse, olvidando que el conocimiento evoluciona y el aprendizaje continuo es necesario para adaptarse a los cambios; y de esta manera mantenerse competitivo. Muy interesante el post!
Mucha razón en tu comentario @hernandezmayrac... A eso le añadiría lo que dicen por ahí "si vas solo llegas más rápido si vas acompañado llegarás más lejos". En la vida hemos aprendido que no sólo se requiere bastante talento, para triunfar hay que acompañarlo con disciplina y estrategia.
Entiendo completamente tu punto, busco la mayor eficiencia posible y por ello tal vez no consideré ese detalle tan importante como bajar el ritmo en plena competencia además de investigar el principio en sí. La constancia es clave pero una buena ventaja marca la diferencia, saludos y gracias por tu aporte.