Ayer cumplí 31 años. Para los niños soy una señora, para las señoras soy una niña... Para mis padres soy la misma que, según ellos , mecían en sus brazos no hace mucho. Yo no me siento distinta y la verdad no me veo tan distinta; pero mirando en retrospectiva, definitivamente ya no soy la misma.
Estamos viendo el mundo cambiar y nosotros estamos cambiando con él, para bien o para mal , jamás volveremos a ser los mismos.
Mi vida no se parece en nada a lo que llegué a imaginar. Pensar así es lo que nos tiene frustrados. No digo que te conformes o te resignes, digo que mantengas la mente abierta porque vivir anclado a ese sentimiento de fracaso no va a llevarte a ningún lugar y mucho menos te acerca a la felicidad.
No descubrí estas cosas por las buenas, yo también lloro las cosas que siento he perdido, algunas perdidas incluso antes de tenerlas... Yo también grito a veces con rabia preguntandome si esto mejorará algún día, sí acaso tanto dolor vale la pena; pero no me quedo ahí, porque aun hay cosas que puedo vivir hoy, y sobre todo, que quiero vivir.
No sé si estas palabras tienen sentido para ti, las dejo aquí por si tienen sentido para alguien. Yo aun tengo muchas heridas que sanar, dolores que llorar y fantasmas que espantar. No soy feliz todos los días, quizá nadie lo sea, pero sé lo que me hace feliz, lo que me da paz y por ahí se empieza.
Mucho sentido... Un abrazo
Un abrazo fuerte que nos conjugue en un mismo sentimiento, mi querida @isauris. Buena reflexión postcumple ;) y a seguir adelante, tienes un camino que vivir. La vida es bella a pesar de lo que nos ha tocado.