Cada vez que te leo, me rompes el alma. Aunque no como tú, también me encuentro en un sitio, solo, frustrado, viendo las mismas paredes mientras las horas y los días pasan, veo como se van mis sueños y mi vida. Yo te entiendo y esto duele, juro que lloré leyendo cada línea... quisiera tener un poder para cambiar nuestra realidad. . . Perdóname pero es difícil no poder dar alientos cuando también te sientes fatal, hay veces que ya no se puede fingir ser fuerte.

Pero lo que dijo alguien por allá arriba es cierto, "no hay oscuridad eterna."