Imagina el arrepentimiento que sentirías si alguien te dijera que solo estabas a un paso de lograr lo que querías, pero simplemente no lo sabías en ese momento y decidiste ceder a esa horrible tentación.
Realmente es así, esa es la triste realidad de algunos, luchan, batallan y poco antes de alcanzar el objetivo se rinden. Es necesario mentalizarnos para terminar todo lo que emprendemos.
¡Bendiciones!