Nos establecemos en un lugar y tomamos lo que queremos de la tierra, y cuando ya no queda más, nos trasladamos a otro espacio repitiendo la misma atrocidad. Hay partes que quedan desoladas, como otras en las que dejamos marcas que pueden tardar hasta miles de años en borrarse.
Tal es el caso apreciado en estas fotografías que tomé ayer con mi teléfono, en la orilla de una de las costas de la zona norte del estado Anzoátegui, Venezuela. Quisiera dar a conocer más detalles con respecto al tiempo que tienen los restos del barco en ese lugar, la procedencia, pero no encontré personas cercanas para averiguar sobre el tema.
Pido disculpas por no haber podido subir las fotografías con una resolución decente. Por motivos que están demás mencionar, en mi país tenemos el internet muy lento. Para poder subir las fotos y participar en el concurso tuve que comprimirlas, perdiendo así la calidad de las mismas.
Buenas imágenes, es muy cierto, tomamos lo que mejor nos parece y le damos el trato que creemos mejor. Excelente post me gusto mucho.
que pesar como se dejan acabar las cosas, ------- saludos...