Estimado amigos, vivir el presente, lo real, lo existente es la fórmula mágica para triunfar en la vida. Generalmente, vivimos angustiados por lo que nos pasó en el pasado y además, pasamos largo tiempo pensando en futuro, planificando lo que queremos, lo que deseamos. Nos imaginamos y nos ilusionamos con todo lo que aspiramos en un tiempo retomo.
Indudablemente, por ser seres pensantes, tenemos la capacidad de movernos en el tiempo pretérito, futuro y por supuesto en el presente. Pero, lo que realmente, nos debe preocupar, donde tenemos que ocuparnos es del presente, el hoy. Si vivimos el hoy, el presente a plenitud, con orgullo, haciendo y edificando bases sólidas en lo económico, en lo social, en lo cultural, en lo religioso, estamos asegurando el presente y dejando buenas bases para el futuro.
Un elemento que hay que cultivar en el presente es la familia. Triunfar familiarmente en el presente es asegurar un porvenir exitoso. Si tenemos una conexión progresista, comunicativa, amorosa con la familia, tendríamos todos los elementos propios para triunfar en la vida de hoy y por supuesto, la del mañana.
Hay quienes buscan la felicidad, el éxito del presente en otros contextos muy alejados de la familia, olvidando que ella es el pilar fundamental para lograr todas las aspiraciones en la vida. Para triunfar, no necesariamente hay que alejarse de la familia, columbra vertebral en la construcción del presente.
Por lo tanto, en el presente, debemos buscar los momentos propicios para compartir con la familia. Por nada del mundo, hay que olvidar a todos aquellos seres amados, porque ellos siempre estarán en las buenas y en las malas. Los compañeros de clase, del trabajo, de la calle, están siempre presente en las buenas, en los momentos de éxito, de abundancia, pero, la familia siempre estará más allá del bien y del mal.
Por esto, considero, que debemos vivir a plenitud el presente en comunión con la familia, receta ideal para triunfar en el hoy y en el mañana.
excelente! un saludo
interesante informacion