—Bien... Será así entonces... —Dijo Morthy.

Dorian y yo caminamos por el bosque hasta el lugar donde se encontraba Mammón, atentos de no ser vistos por él. Llegamos hasta las cercanías del lugar donde este se encontraba; le observamos desde detrás de un árbol por unos segundos pero...

—Niños... Salgan... Vengan a mí... —Dijo Mammón con una voz que parecía salida de película de terror.

Ya nos había visto, era inútil escondernos.

Salimos y fuimos hasta donde estaba él, a cierta distancia, esperando que el plan de Morthy y Ammyt funcionase.

—Valerin... Dorian... Que placer verles a ambos. —Dijo el demonio.

—¿Como sabes nuestros nombres? —Le dijo Dorian.

—Lo sé todo sobre ustedes, sus miedos, traumas, fantasías y enojos, ¿Saben quien soy? —Dijo Mammón.

—Lo sabemos, unos amigos nos contaron. —Le contesté.

—¡Claro! Morthy y la maldita Ammyt. —Respondió —. Dorian, tu novia era muy linda, ¿Quieres verla?

Se abrió un agujero en el suelo de donde poco a poco subió el cuerpo carcomido y descompuesto de Luna, observé el rostro de Dorian y era de tristeza; se notaba que había llegado a amarla.

—Acercate... Tómala... —Dijo el demonio, intentado tentarlo.

Dorian dio un paso al frente para acercarse.

—¡Dorian! —Le grité.

Reaccionó aún con lágrimas saliendo de sus ojos.

—¿Donde están sus amigos? ¿Acaso no quieren verme? —Preguntó.

—No los necesitamos, nosotros solos podemos contigo, nos enseñaron como. —Le dije.

—Ya veo, me temen, es obvio me parece, Ammyt no querrá verme luego de estar aprisionada conmigo tanto tiempo. —Comentó.

Dorian y Ammyt nos advirtieron no acercarnos a menos de tres metros de él, y estábamos al menos a cinco pero aun así sentíamos su tenebroso poder, sentíamos como podía aplastar nuestros pechos sin siquiera moverse, era algo aterrador pero al menos yo no temía a la muerte.

Mammón se encontraba aún sobre el mismo lugar donde había sido invocado por primera vez, y era incapaz de moverse de ahí, no por sus propios medios.

—Veo que les dijeron como defenderse de mí... Pero será inútil. —Dijo mientras poseía el cadáver de Luna.

Lo utilizó como un medio para alcanzarnos... Pero cuando intentó poseernos, rebotó.

—Con que ahí estaban... —Dijo Mammón.

Ammyt y Morthy salieron de nuestros cuerpos dejándonos bloqueados para cualquier espectro que intentase poseernos, y de inmediato salieron a atacarle, entrando los tres al cuerpo sin vida de la difunta Luna.

Los expulsó de inmediato para evitar cualquier sello y comenzó a atacarnos.

Al ver que Morthy y Ammyt nos protegían decidió salir del cadáver pero lo habían bloqueado ahí dentro, haciendo de ese cuerpo, una prisión...

—¡Malditos! —Dijo Mammón.

Este estalló en furia y rompió el sello en el que lo habían atrapado y comenzó a utilizar el cadáver como una marioneta mientras que Ammyt atacaba al verdadero espectro y Morthy se encargaba de preparar el sello definitivo.

El cuerpo de Luna nos atacaba pero Dorian solo esquivaba, no podía golpearle, y Mammón se aprovechó de eso, incrementó su ataque en ráfaga contra él y justo cuando estaba a punto de darle el golpe mortal, me interpuse.

Morthy lo vio y estalló en furia.

—¡Valerin! —Gritó.

Nunca lo había escuchado tan alterado, caí al suelo donde no pude volverme a levantar.

Ammyt continuaba luchando con el demonio pero era demasiado fuerte para él.

—¡Valerin! ¡Haz el ritual! —Dijo Morthy.

Apenas y podía moverme, pero debíamos seguir el plan y si quería que Morthy pudiese derrotarle, debía hacerlo.

Tomé sangre de mi herida y con ella hice la marca en mi mano, estaba perdiendo mucha sangre y sentía que me desmayaba pero logré dibujar el símbolo... Me desmayé...

Pero justo al perder la conciencia, mi mano tocó el suelo de donde salió Morthy en cuerpo presente, con su poder al máximo.

Me abrazó y me dio un beso, sané al instante y me dejó a un lado.

Aquí comienza la verdadera batalla...