Mi poesía se fabrica con tu voz,
de esa tinta fina y tersa
que, riendo, tú me brindas.
Mi aliento se fabrica de tu imagen,
de esa brisa cálida y suave
que mis recuerdos rememoran.
Mi alma, baila un vals improvisado
entre acierto y desencanto
de tus razones y pensamientos.
Mi razón vibra en tu cuerpo,
en un viaje tan perfecto
que de ilusiones se compone
Y mi fe… mi fe está en tu sombra,
en tan neutra silueta
que parafrasea tan hermoso concepto.
Yo estoy en ti,
y no puedes escaparte
de lo que llevas dentro.