Con esta frase célebre quisiera darle comienzo a esto que me encanta, enseñar (por cierto, no soy nada formal al hacerlo, espero me disculpen esa). Aunque cambiaría probar por degustar, y es que este último término, no se refiere simplemente a probar algo, si no a tomarse unos momentos para ser consciente de la acción y potenciar su disfrute, a desglosar cada ingrediente, y hacer de ello una experiencia placentera, y ése, es el gran secreto en el estudio de esta ciencia. Así que, comencemos a degustar.

Pues hay muchos conceptos por allí rodando de acuerdo a las perspectivas de aquellos personajes históricos que se enamoraron de éstas, y dedicaron su vida al estudio y aplicación de ellas, pero en esencia quiere dar a entender lo mismo.

La palabra matemática proviene del griego mathema, cuyo significado es ciencia, conocimiento, aprendizaje. Y es conocida como la reina de las ciencias, nombre dado por el matemático Carl Friedrich Gaus en el siglo XIX, (aunque muchos no están de acuerdo con esa mención, pero ya ese es otro tema), ésta se encarga de estudiar las propiedades y relaciones que se establecen entre los distintos entes abstractos, números, figuras geométricas, etc.

Muchos las han clasificado en, matemáticas puras, aquellas enfocadas en el estudio de sí misma, no haciendo uso de ninguna referencia a aplicaciones reales, y las matemáticas aplicadas, dirigidas al empleo practico de herramientas matemáticas para el análisis o resolución de problemas en diversas disciplinas. Sin embargo en un criterio muy personal, debo decir no estoy del todo de acuerdo con esta separación, creo que las matemáticas y cada una de sus ramas tienen un impacto ya sea directo o indirecto para la comprensión y desarrollo de las distintas áreas en las que nos desenvolvemos, pues bien, aquel matemático que se considera “puro”, en donde sus estudios se basen en resultados de alta abstracción, ¡de alguna u otra manera está construyendo nuevas herramientas! está ampliando el camino de conocimiento ya establecidos, como lo citan, Jhon De Pillis y Nicholas J Rose, en el libro de su autoría, Mathematical Maxims and Minims (Raleigh N C 1988).

Y aprovechando que se hace mención a las ramas de la matemática, éstas, son aquellas áreas de conocimiento en las que se subdivide la matemática, de acuerdo a su estructura y objeto de estudio, ¡hay para todos los gustos! Existen muchos campos de estudio, pero en esencia se engloban de forma más general en, álgebra, geometría, análisis, estadística y probabilidad. Y en cada una de ellas existen un sin fin de temas a estudiar, y resultados ansiosos por ser descubiertos.

Y estas son las preguntas clásicas en la historia de “Lo que los estudiantes preguntan en clases de matemáticas”. Jejeje, todos preguntan lo mismo, y yo, pues, casi siempre respondo lo mismo, sin mucha filosofía.

Las matemáticas no fueron inventadas, podría decirse que fueron creadas, estructuradas y formalizadas, ¡creadas y fomentadas por necesidad! Pues sí, ellas, así como cada una de las ciencias puras, han surgido mediante la necesidad que ha tenido el ser humano de desarrollarse mediante la evolución de su intelecto. Siendo capaz él mismo, de descubrir “leyes que existen en la naturaleza” y que pueden ser expresadas en lenguaje matemático, para su posterior estudio mediante los axiomas en los cuales, ésta se fundamenta. ¿Necesidad de que? Necesidades tan básicas y de uso tan común para el ser humano en la actualidad, como lo es contar, medir y determinar la forma de aquello que se encuentra en su entorno. De allí surgen los de lo que hoy día se conoce como la ciencia base y fundamental para el desarrollo de todo lo que hoy día existe, a pequeña o gran escala, muchas veces de incógnito, las matemáticas siempre serán parte del elenco de nuestra vida.

Y esta es la pregunta quizás más frecuente a la cual me enfrento cada día, pregunta que todos en algún momento nos hemos hecho. He podido notar que muchos ignoran la magnitud de la importancia de las mismas, al creer que las matemáticas solo sirven para realizar ciertas operaciones entre números, ¡pues se quedan cortos! Ya que éstas se han desarrollado al ritmo de las necesidades del ser humano de encontrar un porque a muchas situaciones reflejadas a su alrededor, y su desarrollo ha sido a tal punto de ser catalogada como la base en la que se fundamentan las otras ciencias, y si, aunque muchas veces parecen estar ajenas a la vida cotidiana, dando la impresión de que no son necesarias, las matemáticas se encuentran ocultas en casi todo lo que hacemos en nuestro día a día, desde realizar nuestras operaciones comerciales, cocinar, tomar decisiones, incluso en aéreas que aparentemente distan de éstas, como lo es la medicina, el derecho y la música, las matemáticas están presentes en la trayectoria de los planetas, en los cálculos de la teoría de la relatividad, en la estructura de los seres vivos, en los comportamientos sociales. Ellas junto con otras ciencias, han sido capaces de describir el universo, como dijo el ilustre Galileo Galilei, “la naturaleza está escrita en lenguaje matemático”.

Solo resta decirles, que esto es solo un asomar en el inmenso mundo de esta hermosa ciencia, mi objetivo en lo que me sea posible, ayudarles a entender un poco sobre ellas, su lenguaje, y las evoluciones destacadas que han tenido en diversas áreas, ¡vamos! ¡Démosle el protagonismo que merecen!

Me despido, dejándoles con una pequeña sección que quisiera ir desarrollando llamada ¿sabías que? con el fin de dar a conocer datos curiosos sobre los temas expuestos, espero sea de su agrado.

¡Las matemáticas te ayudan a razonar, a pensar y a desarrollar tu capacidad lógica!

Los científicos aseguran que aumentar y progresar en nuestros conocimientos ayuda a agudizar la memoria, mejora la habilidad para resolver problemas y el lenguaje. A esto se le conoce como aprendizaje acumulativo, cuando sumamos nuevos datos e información a conocimientos que ya tenemos. Un buen ejemplo son las matemáticas, que funcionan como si fueran capas: a cada conocimiento que adquirimos, como las sumas o las restas, vamos añadiendo otros, como el álgebra. Es lo que hacen los estudiantes en los colegios y es algo que, según los neurólogos, deberíamos seguir practicando toda la vida.