Cosas que no me atrevería hacer durante el SEXO

Hace unos días me encontraba en una reunión con varias amistades celebrando el cumpleaños de un compañero de trabajo. Entre risas y jodedera, surgen los diferentes juegos comunes en las fiestas de adolescentes. Algunos de estos juegos son aquellos que te retan o impulsan a tomar tragos muy seguidos, otro de retos físicos y los de retos sobre que harías o no en un tema específico.

Cuando ya estábamos bastante en confianza y con algunos tragos encima, comenzaron a surgir las preguntas incomodas, entre tantas la que más recuerdo fue: ¿Qué es lo que nunca harías en el sexo?

A mi mente vinieron varias prácticas que considero que nunca haría en el sexo y mucho menos me las dejaría hacer por mi pareja. Entre ellas tenemos:

Nunca me dejaría hacer y mucho menos hacerle a mi pareja o acompañante sexual la Asfixiofilia o asfixia erótica, para los que no conocen es una técnica bastante aplicada por algunos adolescentes que aseguran que mediante esta práctica encuentran mejor satisfacción sexual. La asfixia erótica es una manera muy singular de obtener satisfacción sexual a través de la disminución de la respiración durante la actividad sexual. Se realiza durante el acto sexual impidiéndole a la pareja la respiración, bien sea por bolsas en la cabeza, manos en el cuello aprentando impidiendo el paso del aire, o colocando sojas. De verdad me parece una práctica bastante peligrosa y que puede traer consigo grandes consecuencias.

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Otras de las cosas que surgieron fue la Urofilia algo bastante inusual enfocada en la orina. Por lo general la practican las personas que les gusta su mismo sexo, pero que no deja de ser practicado por muchas parejas heterosexuales. A esta práctica sexual se le conoce también como Lluvia dorada y se lleva a cabo cuando la pareja te orina en la cara o en el cuerpo. Muchos que según las han practicado aseguran que logran una gran excitación con esta práctica.

El automasoquismo sexualmente es una práctica en la cual la persona se lesiona a sí misma, de manera consciente para provocarse dolor, heridas, abrasiones, etc. Con el fin de alcanzar un orgasmo. El dolor les ayuda a conseguir la excitación que desea y al nivel que ellos quieren. Como parte de estas prácticas están: Pincharse, cortarse, quemarse con velas, pegarse con correas, fuetes, etc. Hay varios juguetes sexuales que ayudan a los masoquistas con estas prácticas.

Piercings en los genitales o tetillas es algo que jamás haría, de verdad no me quiero imaginar el dolor que puede producir sobre todo colocarse un piercing en la cabeza del pene. Es algo que nunca se me ha pasado por la mente.

Quizás pensaran ¿a qué clases de reuniones va Andrés? Pero amigos, estas son conversaciones normales en cualquier grupo de adolescentes. En reuniones donde hay jóvenes y alcohol se pueden escuchar cosas que ni se imaginan. Sobre todo de este tipo de prácticas sexuales entre adolescentes. Todas las que nombre anteriormente fueron algunas de las respuestas que dieron mis amigos, entre ellos tanto hombres como mujeres.