Uno de mis pasa tiempos favoritos es caminar, algunas veces puede ser sin rumbo concreto o bien hacia ese destino que he visitado infinidad de veces y siempre en el trayecto algo distinto me sorprende, para demostrarme que miramos sin mirar.
Algunas veces basta con mirar un poco más arriba de lo cotidiano y descubrirnos con esa ventana que siempre nos ha visto pasar, con esa reja que cuenta las historias de todxs quienes le han tocado, de esos imponentes edificios que se encuentran resguardando la memoria de la humanidad.
Hace un par de meses decidimos mudarnos de la ciudad de México a Cuernavaca (Morelos) a 40 minutos de la ciudad. Si alguna vez han escuchado la frase “México es muchos Méxicos” es completamente real.
México multicolor, el de la gastronomía que cambia de esquina a esquina negándose a ceder a las nuevas tendencias, las miradas del pasado vivo escondidas como calves para no permitirnos olvidar de donde somos, como somos y así elegir hacia donde queremos llegar.
Nos hemos propuesto caminar por Cuernavaca tanto como nos sea posible, viajera del mundo, siempre he estado convencida de que las ciudades entran por los pies, me encanta pensar que cada ciudad tiene una historia aguardando por cada persona, una novela no escrita, un cuento esperando ser descubierto o un callejón que inspire un poema.
Cuernavaca como cada kilómetro cuadrado de nuestra nación es cuna de nuestra historia, resguardan el centro histórico el Palacio de Cortés, la catedral, el Jardín Borda y los ex palacios, convertidos en haciendas para finalmente terminar fragmentados por la vorágine del capitalismo que los ha convertido en pizzerías o tiendas de 24 horas.
A pesar del ruido de la ciudad, en cada caminata los sonidos del pasado son más fuertes, he descubierto pequeños azulejos que se niegan perder su color, una puerta abierta que nos invita a pasar y recordar la infancia llena del color del papel picado. Al fondo, vigilante del tiempo me encuentro con el reloj del Palacio de Cortés, ¿cuántos ojos se habrán posado en él? a ¿cuántas personas habrá visto caminar desde que es dueño de ese espacio?
Finalmente en el Jardín Borda el viento entra con sus risas, ahora esos muros que guardan los secretos de Maximiliano y Carlota, las canciones de lxs revolucionarixs que lo hicieron cuartel, son cómplices de la primera palabra de Malinalli y las sonrisas de Wayra, es decir, ahora Cuernavaca es nuestro hogar…por un tiempo.
This post received a 3.4% upvote from @randowhale thanks to @obxidiana! For more information, click here!
Congratulations @alondratzin! You have completed some achievement on Steemit and have been rewarded with new badge(s) :
Award for the number of upvotes received
Click on any badge to view your own Board of Honor on SteemitBoard.
For more information about SteemitBoard, click here
If you no longer want to receive notifications, reply to this comment with the word
STOP
Congratulations @alondratzin! You have completed some achievement on Steemit and have been rewarded with new badge(s) :
Award for the total payout received
You got a First Reply
Click on any badge to view your own Board of Honor on SteemitBoard.
For more information about SteemitBoard, click here
If you no longer want to receive notifications, reply to this comment with the word
STOP
Congratulations @alondratzin! You received a personal award!
You can view your badges on your Steem Board and compare to others on the Steem Ranking
Vote for @Steemitboard as a witness to get one more award and increased upvotes!