Amiga, encuentro muchas cosas de mi en tu relato. Creo que la vida de alguien que ama los libros pero no tiene acceso a ellos terminan siendo parecidas, al final ellos nos encuentran a nosotros. Todavía recuerdo el día que descubrí como descargar libros electrónicos. Dios bendiga a esas almas piadosas que se toman la misión de publicarlos gratis y también a los autores que no les molesta jejejej