Mírame otra vez
aunque esta no pueda verte,
porque te juro que no lo siento,
prometo no pensar en ti cada mañana
y dejar que se mueran todas tus plantas.
Se me cae la piel a trozos
como una leprosa
-que no soy-
intentando guardar cada pedazo
y esperándote para que me pegaras con celo.
Sigo teniendo postales que defendería con mi vida,
a pesar de haber encontrado mi cadáver
al fondo de un contenedor en medio del Retiro,
como cada Navidad.
Hay un niño riéndose mientras le llueve en la cara
y saca la cabeza un poco más por la ventanilla;
como si conociese el paraíso
-que no fue-
de un baño de burbujas
en el que volvería a enseñarte a nadar.
Hay tres adolescentes y medio
sin saber lo que ignoran,
buscando un parque en el que follar,
como un valiente
-que no eres-
temblando de frío a la orilla del manantial
-que es espejismo-
en el que la arena, el sol y las dunas querían que creyésemos.
No dejes de mirarme
aunque pueda sentirlo,
porque te juro que es mentira
te prometo que solo pienso en ti toda la noche
todas las noches
y antes de que se den cuenta
de ti van a crecer bosques enteros.
Imagen de pixabay
keep up the good work girlie xx