ESTANDO ATADO A TU CABELLERA
Estando atado a tu cabellera
Días de sol y cercanías tuyas
A mis manos de palmas y aleluyas
Tu cuerpo tendido en mi cabecera
Era sábado de un regocijo
Que ascendía de tu piel morena
Entre uvas y olores que cercena
Mi poca fe en un crucifijo
Ahora que renuevo mi estadía
Casa del ser de mis prohibiciones
Señora que desarma mi dos mundos
Aquel antiguo que en mí florecía
Deseo tuyo sin inhibiciones
Que mi libra del ser del inframundo