Sí, amigos, el título es totalmente intencional.
Un día como hoy, me encontraba de camino al trabajo. Son 20 minutos caminando y 20 en autobús, suficiente tiempo para reflexionar acerca de la vida.
Me encontraba voluntariamente acercándome al lugar donde pasaría las próximas 10 horas del día, para desempeñarme en algo que no me gusta, lo cual me traía frustrada desde hace tiempo.
En uno de esos tiempos de reflexión me pregunté a mi misma: "¿Cuáles son tus sueños?", y si les soy sincera, había olvidado la respuesta a esa pregunta y empecé a replantearme todo en la vida, recordé que efectivamente, sí tengo sueños, a lo cual me hice otra pregunta: "¿Lo que estás haciendo te acerca a cumplir alguno de ellos?", la respuesta fue NO.
Lo seguro no es lo mejor.
Que bonito es tener todo seguro en la vida, sabes que cada fin de mes está asegurado el dinero para pagar el alquiler, servicios, alimentación, salud y todo lo que te da cierta "calidad" de vida. Sin embargo, que bonito sería estar apasionado por aquello en lo que trabajas, tener tiempo de hacer una deliciosa comida para tus amigos y/o familiares, no estar supremamente cansado cada día de la vida y si lo estás poder quedarte un día a dormir hasta las 10:00 am y que esto no arrebate la oportunidad de llevar el pan a tu casa.
Pues así, mis amigos, es el sistema. Si no tenemos un empleo de lunes a sábado de 9 horas diarias más horas extras y sin este, supuestamente no podemos "salir adelante en la vida" y luego se pasó tu juventud, ya te duele por aquí y por allá, y tu único día libre en la semana solo quieres dormir, cuando podrías estar viajando, disfrutando, teniendo nuevas experiencias y percepciones.
Por tal motivo te digo, lo seguro no es lo mejor. Tener asegurado el dinerito a fin de mes no es lo mejor para los soñadores, sino para los conformistas.
¿El tiempo es dinero?
Esta popular afirmación es una vil mentira que nos han dicho durante años.
Hace poco iba caminando, cruzaba un puente largo y altísimo, debajo pasaba un hermoso rio, respiraba aire natural; suficientes elementos para que mi mente volara. Recordé que había transcurrido un mes de trabajo, había cobrado $300 y me pregunté: "¿Un mes de tu vida vale eso?", literalmente me puse a llorar, porque en ese mes no hubo tiempo para compartir con mi familia y a pesar de que están cerquita de mi los extrañaba como si estuvieran en otro país, no los pude disfrutar. Debía trabajar para tener dinero y llevarlos a comer a un buen lugar, pero luego tengo el dinero y no tengo tiempo.
Y no solo lloraba porque no pasé tiempo con mis seres queridos, lo hacía porque entendí que nunca más iba a recuperar ese mes de mi vida.
El dinero es recuperable, el tiempo no. El tiempo es vida que se va y nunca más vuelve.
¡Hoy te digo a ti que des motivaciones en tu vida!
Amigo, la vida se nos va cada día, los días pasan tan rápido que parece desvanecerse el tiempo. Yo sé que quizás tienes tantas responsabilidades que necesitas el dinero seguro a pesar de sacrificar tus más anhelados sueños, pero esta vida es una sola y es corta, en la vejez tal vez no tengamos las fuerzas para luchar como las tenemos hoy. Anota cuales son tus sueños, desglosa lo que vas a empezar a hacer cada día para llegar allí. Posiblemente esto se convierta en pequeños pasitos que vas a dar después de la jornada de trabajo con todo el cansancio, pero vale la pena.
Tengo algunas cosas que decirte:
1. ¡Sueña, sueña, sueña!
2. Cree en ti, tú puedes hacerlo.
3. Cree en tu sueño, no es una tontería.
4. ¡Haz algo! Por favor,¡haz algo!
5. Atrévete, atrévete y atrévete
6. Sal de tu zona de comodidad.
¿Y los resultados?
Hoy no les puedo decir que ya alcancé la cúspide de mis metas en la vida, pero de algo estoy totalmente confiada y segura, y es que un día estaré contándoles que se siente estar allí.
Un abrazo para todos.