Primero explicare lo que significa el Karma y el Darma. El karma es un aprendizaje que debe ser superado o transformado para avanzar en la vida, cuando este aprendizaje no se hace, es como si la vida se quedara estancada en un circulo vicioso, donde se repite una y otra vez la misma experiencia, hasta ser transformada.
El Darma es la experiencia de vivir el éxtasis que genera el haber superado el karma, pues al haber comprendido la programación limitante y superarla, llegan nuevas experiencias y se entra en una etapa de expansión que genera muchas emociones positivas, regenerando y enriqueciendo la vida misma.
Al nacer, las experiencias de las vidas pasada quedan grabadas como un sistema de emociones intuitivas pero las experiencias como tal, no son recodadas, esto nos deja en este mundo un poco desorientados sobre nuestro proceso de aprendizaje en la evolución de la existencia.
Sin embargo la información de la evolución como ser espiritual, reside dentro de la familia en la que se nació, pues en ella se aprenderá todo lo que necesita para evolucionar.
¿Como saber si nací en una familia Karmica o Darmica?
Reencarnamos en una un grupo de familias por afinidad, porque todos los que están allí experimentaran aprendizajes importantes para su evolución espiritual. Haciéndose espejo los unos de los otros en actitudes y comportamientos, actuandolos de formas diferentes pero en esencia con la misma carga energética emocional.
Te das cuenta si tu papel en tu familia es Karmico o Darmico por la diferencias emocionales que se generan en el circulo familiar.
En una familia donde el proceso evolutivo requiere de mayor intensidad en el aprendizaje o por llamarlo de alguna manera hay mucho Karma, existen comportamientos tales como desaprobación, resentimiento, competencia, prepotencia, abandono, victimismo, juicio etc. Generando que sean familias disfuncionales y divididas.
Por el contrario en una familia Darmica, es donde el amor es la base de todo y se genera, seguridad y alegría, emociones de disfrute y expansión. Las personas que suelen nacer en este tipo de familias, tienen la capacidad de manifestar fácilmente sus deseos.
El Padre nos enseña a través de la experiencia, por esto reencarnamos en este tipo de familias, con diferentes tipos de aprendizaje y no es que una experiencia sea mejor que la otra y aunque parezca que allá desventajas entre las formas de aprendizaje, en el karma y el Darma, es porque la evolución en el universo se funciona como una espiral, con saltos cuánticos y la capacidad de darse cuenta, es la que te nos da la posibilidad de cambiar los paradigmas de la vida.
Evolucionamos porque reconocemos que algo no anda bien en el entorno y en la forma como reaccionamos ante el y asumimos la responsabilidad de esto, aceptándolo sin juicio, con amor para luego cambiar y aprender pero es la necesidad misma la que nos impulsa al cambio. Cuando perdemos algo, cuando no obtenemos los resultados que queremos, cuando hay un vacío en el interior que no se llena con nada de este mundo material.
Comprendemos que somos nosotros los que tenemos el poder de transformar las experiencias vividas y que la experiencia en la familia es solo para aprender a actuar con autonomía, amor propio y sacar con ímpetu del poder interior y explotarlo, esta es la finalidad del Karma.
Sin embargo hay personas que se quedan actuando como una victima sin asumir la responsabilidad de sus actitudes, envueltas en la rueda de la experiencia repitiéndola una y otra vez.
La diferencia de una familia Darmica es que simplemente ya hizo el proceso de aprendizaje y esta disfrutando merecidamente la experiencia de la fraternidad que amor genera pero no significa que no siga evolucionando, lo hace en una manera más consciente porque el amor les ha enseñado la excelencia y se fuerzan por ser mejores cada día.
Hacer parte de una familia Karmica es un gran desafío, y requiere un gran esfuerzo, para salirse de los comportamientos nocivos y negativos que esta genera pero comprender el porque y para que, se esta en ella, hace parte del aprendizaje y cuando te liberas te haces mas fuerte y más inteligente pues la sola sabiduría que adquieres en la experiencia, te da la posibilidad de aprender el amor y comprender y ayudar al prójimo.