He arrived by chance a few weeks ago. I discovered him one night looking for dinner leftovers. At first, I thought he was a casual visitor who was courting some neighborhood cat, then I understood that this strange being had come to stay.
I was impressed by his demeanor, he walked as if the world should surrender at every step of his, in addition to his white fur. That first night, he seemed like a fantastical animal, the moonlight gave him a certain mysterious air as he shone in the darkness like a specter.Since then, he has returned every night and every day.
Although he does not stay but returns to the courtyard at specific times as if he wanted to remind me that he exists. But, how to ignore his beauty? How to deprive him of the throne he has placed on the wall?
I would like for him to acclimate more, to feel at home. But I understand when I look at him that he is a free spirit and I am content with his visits at odd hours, he is part of the courtyard, there he has his empire and I let him be.
His signs have been clear: he intends to be part of our family dynamic, but in his own way. So I let him rule, wander as he pleases. He does not want to enter the house because he feels comfortable in the courtyard. There he has his space and he enjoys it.
Today he allowed me to photograph him. His demeanor and majesty are captured in these two images. He looked at me as I held the phone to take the picture. He waited calmly for me to finish photographing him, while he was contemplating his domain from the wall. Then he got up with all the calm and elegance that a cat knows how to show, and without haste, he continued with his daily and secretive routine. My mother, upon seeing the photo, told me that this cat seemed to have intentions of staying. "What name shall we put him?" she asked.
I finally gave him a name. I tried to find a good name and I couldn't help but draw an analogy with Russian fairy tales and the story of their monarchs; the only name that seemed appropriate for his majestic figure was Zar. This is Zar: the master of the wall.
The rights to the photographs and the text belong to me.
AI-free images, taken with my Techno Sparks mobile phone.
Versión en Español
Llegó por casualidad hace unas semanas. Lo descubrí una noche buscando sobras de la cena. Al principio pensé que era un visitante casual que andaba de amores con alguna gata del vecindario, luego entendí que este ser extraño llegaba para quedarse.
Me impresionó su porte, caminaba como si el mundo debiera rendirse a cada paso suyo, además de su pelaje blanco. Esa noche, la primera, parecía un animal fantástico, la luz de la luna le daba cierto aire misterioso mientras resplandecía en la oscuridad como un espectro.Desde entonces ha regresado cada noche y cada día.
Aunque no permanece sino que vuelve al patio en horarios específicos como si quisiera recordarne de que existe. Pero, ¿ cómo ignorar su belleza?
¿Cómo privarle del trono que ha puesto en el muro?
Quisiera que se aclimatara más, que se sintiera en casa. Pero comprendo al mirarlo que es un espíritu libre y me conformo con sus visitas a deshoras, él es parte del patio, ahí tiene su imperio y le dejo ser.
Sus señales han sido claras: pretende ser parte de nuestra dinámica familiar, pero a su manera. Entonces le dajo señorear, andar a su antojo. No quiere entrar a la casa porque se siente cómodo en el patio. Allí tiene su espacio y le agrada.
Hoy me permitió fotografiarle. Su porte y majestad quedan capturados en estas dos imágenes, me miró cuando sujetaba el móvil para hacer la foto. Esperó con calma a qué terminara de retratarle, mientras estaba contemplando su dominio desde el muro. Luego se levantó con toda la calma y la elegancia que un gato sabe mostrar y sin prisas siguió con su rutina diaria y secreta.Mi madre al ver la foto me dijo que ese gato parecía que tenía intenciones de quedarse. ¿ Qué nombre le pondremos? -preguntó.
Le puse, por fin, un nombre. Traté de encontrar un buen nombre y no pude evitar la analogía con los cuentos de hadas rusos y la historia de sus monarcas; el único nombre que me pareció apropiado para su majestuosa figura fue Zar. Este es Zar: el amo del muro.
Los derechos sobre las fotografías y el texto me pertenecen.
Imágenes libres de IA, tomadas con mi móvil Techno Sparks.
Translated and formatted with Hive Translator
A warrior that great cat
Ujumm. He is brave, jjjj
Me encanta el nombre que escogiste, se ve que ha tenido una vida dura pero sigue muy firme
Así mismo ❤️
Casaría a Zar con Leticia mi gata. Tal vez abandone la promiscuidad 😂