Que se sepa, fue en el año de 1875 cuando se tuvo noticias del primer hombrecito de jengibre en forma de galleta que intentó escapar de su cocinera. De ello dio cuenta la revista St. Nicholas Magazine.
Pero la versión más conocida es la que escribió Florence Liley, YoungThe Gingerbread Man, en 1918 (recordad que es un cuento de la tradición norteamericana).
Fuente
Hasta aquí la historia oficial. Ahora hagamos breve reseña de la historia real.
Las galletas no salen corriendo del horno así nada más, como ya sabrán. Si lo hacen, es porque algo en tu conjuro ha fallado.
La historia que tal vez conozcas es la siguiente: una señora que tenía afición por la bollería horneó un día una galleta y le dio forma de hombrecito. La galleta era de jengibre.
Cuando la galleta estuvo bien doradita, la cocinera abrió la puerta del horno y, hete aquí que el hombrecito de galleta salió corriendo velozmente y escapó de la cocinera. También de unos niños, y de un cerdo y de un caballo. Corría más rápido que todos los que querían comérselo y vanagloriaba de ello, retando a todos a alcanzarlo. Pero no pudo con la astucia del zorro, quien le ofreció ayudarlo a cruzar el río para escaparse de sus golosos perseguidores y, aprovechando que estaban en medio de la corriente, aventó al hombrecito hacia arriba y luego lo engulló.
Es una historia de Navidad redonda, que enseña el precio de la soberbia.
Pero los hechos no ocurrieron así.
Ya para 1800, y aunque los procesos de Salem tenían más de cien años, pero entre el miedo y la crueldad, lel arte de la brujería se había degradado bastante. Las recetas se heredaban en secreto y con frecuencia se torcían en el camino. Si a esta circunstancia le sumas una bruja demasiado ávida de venganza, bien puedes tener hombrecitos de jengibre corriendo por el pueblo. O peor.
Mi teoría es que esta bruja aficionada a los hornos, que ha pasado a la tradición como la ancianita que por "casualidad" hizo un ser sustantivo a partir de una galleta era una bruja poderosa con una mala receta.
De hecho, esta es la historia que me contaron:
Un día, hace mucho, mucho tiempo, una anciana maga muy poderosa quiso vengarse de un magistrado que se negaba a pagarle una factura de pan de todo un año.
Horneó una galleta de jengibre y le dio forma de hombrecito. Este hombrecito debía salir de la canasta en la casa del juez y darle un susto de muerte. Pero la cosa no salió bien.
La maga, que pretendía crear un ser sustantivo, no se cuidó de darle instrucciones a la masa, de manera que insufló vida sin determinar su voluntad.
El hombrecito de jengibre, al sentirse quemado en el horno, se vengó de su torturadora. La persiguió por el pueblo, hasta que la maga se internó en el bosque. El bosque se incendió y ni la maga ni la galleta volvieron a salir.
El magistrado quedó bastante satisfecho con el giro de los acontecimientos y vivio una vida corrupta y larga, sin mayores angustias.
Receta de galleta de niño (de jengibre)... que no sale corriendo del horno.
Todo el proceso es casi normal. Atención a la nota final.
Ingredientes
2 tazas de harina de trigo para todo uso
1 cucharaditas de jengibre molido
1/2 taza de mantequilla a temperatura ambiente
1/2 cucharada de levadura en granulada
1 cucharadita de canela molida
1 taza de azúcar moscabada
1 huevo
1/4 de taza de miel
Preparación
Mezclar los ingredientes secos en un recipiente. Aparte mezclar la mantequilla y el azúcar hasta obtener una masa suave. Agregar esta mezcla a los ingredientes secos y mezclar. Agregar la miel y el huevo. Amasar hasta que despegue de los dedos. Dejar reposar la masa cubierta con un lienzo durante tres horas.
Formar las galletas.
Hornear a 180 °C por 15 minutos.
IMPORTANTE
Mientras formas tus galletas debes susurrar el propósito con que las creas con estas palabras:
Te he hecho con harina y fuego
para que cumplas mi deseo:
(aquí dices tu propósito)
Te he hecho niño, pero no es juego.
Te hice pequeño
para que cedas a mi empeño.
Te hice débil
para que a mi voluntad te pliegues.
Y si así no haces
que las llamas te achicharren.
Puedes enviarlas a quien desees con el mandato que tu corazón te dicte.
Feliz Navidad.
Sí... sé que te has preguntado por qué galleta de niño y no galletas de hombrecito...
Es que soy mala.
Para crear los elementos gráficos de este post, fabriqué a mis personajes con los programas de código abierto Make Human y GIMP. Hice mis collages digitales usando las siguientes fuentes libres de Pixabay y Clipartz:
https://pixabay.com/es/illustrations/cocina-medieval-platos-cl%C3%A1sico-6261814/
https://pixabay.com/es/photos/madera-cuchara-cocina-de-madera-1205698/
https://www.klipartz.com/es/sticker-png-tpcqg
@suspiria Me achicharraron las llamas, jajaj
Feliz Navidad
Uuuuuuh! Guardaré este conjuro y lo compartiré con mis amigas del aquelarre.
Hay tanto que decir sobre el Hombre de Jengibre: es pan, es galleta, es galleta suave, es una panqueca. Jeje... Cuál es el motivo: hacerte tu golem en vista de que ya estás viejo y sin hijos, o no andar de fanfarrón, o no confiar en "el zorro" (cualquiera puede ser un zorro)...
Me parece perfecto que sea un niño en la versión de #suspiria, ya que hoy en día los niños se identifican, creo yo, más con los niños más que con los adultos de las historias que leen, o que les cuentan. Esto, gracias al lugar especial que la la sociedad les ha concedido desde hace un par de siglos.
Ahora, hablando de cosas serias, a esa receta le falta clavito 🤣
Gracias por detenerte a comentar. La cocina es tu especialidad. Lo aprecio enormemente. La galleta de jengibre, como la conozco, en su versión cllasica es gingerbread cookie. Ese intermedio entre pan y galleta o galleta suavecita. Su preparación es muy parecida a la del pan, péro su formado es el de galleta.
Sobre la forma de niño, fue intuitivo. Me has dado argumentación al respecto. Gracias.
Y la mención de los clavos me da cierto repelús.
OMG adoro tus posts jajaja siendo sincera, no conocia ninguna de las historias del muñequito de jengibre, me acabo de enterar y la que mas me gusto fue la de la maga que se quiso vengar y le salio el tiro por la culata, que barbaridad 😲
Esa galleta de niño no me dejara dormir por las noches, quiza porque ya he comido muchas galletas de niños y ahora me estan atormentando -jum- olvide susurrar los propositos
Felices y aterradoras fiestas 🍷
Jajajaja no me pregunte lo del niño hasta que leí lo último. Estoy casi tan mal como.vos jajjajajaja nunca hice estas galletitas..me da pesar el pobre hombre xilófono de jengibre pero.quien lo manda a ser tan delicioso jajaja saludos querida..voy a ver si un día lo preparo.
Muy simpático tu post, más allá del toque de terror. Buen manejo de la ironía y el humor negro. Le dan ganas a uno de comer galletas de jengibre, pero sin niño (quizás no se la lleven mucho con esta especia 😀). Saludos, @suspiria.
jajajajajajaja pero qué gran estilo tienes para dar una receta de navidad jajajajaja no me esperaba la receta al final, estaba tan intrigada con la historia.. jajajajaj
Gracias por pasar y comentar, @pannavi. Eres muy amable. Prueba a hacer la receta... y ten cuidado 😈😈😈
Muy interesante todo lo que nos cuentas del muñequito de jengibre, no sabía que había una historia al respecto de este.
Voy a empezar a preparar estás deliciosas galletas, eso sí espeto no salga corriendo. Jeje
Un abrazo escalofriante.👻
Excelente noche.