No hace mucho me lance a hacer fotografía para eventos de bodas, me sentía un poco inseguro en aquel momento pero ya estaba alcanzando cierta madurez en el uso de la cámara asi que necesita un reto. Comencé haciendo una boda a un precio bastante bajo para unas amistades de mi novia y me fue de maravilla, teniendo en cuenta los pocos recursos en cuanto a lentes y accesorios que disponía en aquel entonces. Hoy pienso mostrarles el resultado de la última boda en la que tuve el placer de trabajar y fue ademas la primera desde que retome la fotografía.

Pero déjenme darles una idea de lo que se espera de una boda en Cuba. En mi país se suele ver mucho a la novia sentada sobre los asientos traseros de un auto convertible antiguo, conocidos como almendrones aquí, adornado con globos de colores y recorriendo las calles hasta llegar a al palacio de matrimonio con la algarabía del claxon. Desde ahí comienza la ceremonia que no varía mucho a otros países y luego siempre existe una fiesta antes de salir a la luna de miel. Pero hasta este momento nunca me había tocado hacer una boda con dicho recorrido así que fue una sorpresa para mí.

Aún así fue gratificante el trabajo, siempre lo es cuando se habla de una boda. Estas siendo participe de bellos momentos y tienes ademas la responsabilidad de captarlos. Debo decir que no fui el único al que le gusto el resultado, los novios también quedaron maravillados y hoy día disfrutan de sus fotos. Hoy les dejo una selección de las que más me gustaron y espero que a ustedes también. Un saludos a todos.