Saludos, esta es mi participación en el concurso TopFiveFamily Observa Piensa Escribe

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La Abuela Koi

Una tarde de mucho calor, me encontraba caminando por el parque y observé lo que una vez fue una fuente, en aquel entonces estaba colorida con las luces que llevaba a su alrededor, las busque y no quedaba nada de esos faroles de colores.

Mire y me dije que desidia de los gobernantes que en vez de mantener en buen estado este tipo de cosas.

Mientras observaba se acerca una señora mayor con una botellita y al llegar justo a la fuente vierte el líquido que trae que ese envase.

Mi mente pensó vino a tirar el agua en esta vieja fuente, la señora se marchó.

Yo decidí seguir caminando y de repente me encuentro a una amiga, al estar en conversación amena con ella, vuelvo a observar a la señora hacer lo mismo, a mi mente llegó la frase mañas de viejos.

Pasaron unos minutos y me amiga me invita a sentarme en la banqueta que se encuentra aquí en el parque justo casi al frente de lo que fue la fuente.

Mientras charlamos de cosas del trabajo, aparece nuevamente la vieja con su botellita que vacía en la fuente, ya de tanta curiosidad le comento a mi amiga deteniendo de forma brusca en su hablar.

Que sucede me dice, a lo que le respondo que observará a esa anciana, me dijo cuál es el problema, ya verás lo que va hacer le respondí.

La señora se marchó y al ratico volvió, le dije eso lo ha hecho desde que estoy aquí, repite la misma acción, a lo que mi amiga dice: ella querrá llenar la fuente de botellita en botellita y se hecho a reír.

Eso pensé yo, pero si te das cuenta la fuente tiene un tubo con agujero por dónde le sale el agua.

Vamos a ver cuándo se marche me dice ella, está bien y así hicimos cuando la señora se fue nos acercamos a la fuente y no vimos nada, pero de repente apareció la señora y nos dice, vinieron a ver los pecesitos, yo los he estado observando a ustedes.

Los pecesitos, exclama mi amiga, la señora le responde sí, miren vean bien acérquense y verán.

Así lo hicimos y mi amiga dice, si allí están míralos nadar, son tan pequeños.

Y si, allí estaban unos cuantos pecesitos que traía la anciana a la fuente, nadaban entre las piedras que allí se encontraban, le dije pero se pueden morir si el agua se llegase a secar, a lo que ella respondió, no creo está tubería está conectada a la toma principal de la ciudad.

Le pregunté que de dónde ella traía esos peces y me dijo que sus nietos se los regalaban.

No le dimos mucho importancia a eso y mi amiga y yo aclarada ya la incógnita decidimos despedirnos.

Yo seguí allí admirando los peces y mi amiga se fue, al ratico llega la señora con su botellita y dos pecesitos de colores, los observaba nadar por lo que un día fue una fuente y pensé ojalá existieran más personas como está abuelita.

Cuando ya me disponía a irme llega mi amiga exaltada, le digo que tienes te asaltaron pregunte, por qué estás así, a lo que tomo aire y pudo dejar de jadear me respondió ya se de donde la vieja saca los peces.

Le dije si, ella comento que sus nietos se lo regalaban, pues no me responde, más adelante está la feria y allí están exhibiendo muchos peces los cuales tienen un valor alto.

De que hablas, no entiendo de dónde sacas eso peces, lo que me dice al partir de aquí encontré a un amigo policía que está vestido de civil, al verme me aborda y me interroga preguntándome que hacía con la abuela del terror.

No entendía lo que hablaba, le dije que me había encontrado de casualidad contigo y vimos lo que hacía la señora, fuimos a ver y nos pareció muy bonita su acción.

Mi amigo me responde tu estás loca, ella no hace buena acción, tenemos tiempo tratando de agarrarla y hoy por fin será el día. Esa dulce anciana como dices, es una de las más grandes mafiosas del país, junto a sus nietos trafican peces Koi, que luego son vendidos a países extranjeros por alta suma de dinero, el mismo que usa después para mantener a sus nietos en el vandalismo.

Si te quedas allí o tu amigo serán implicados de complicidad, ya estamos cerca de atraparlos, sus nietos están atracando a todo el que compra pez Koi y son entregados a ella.

Luego ella los deposita allí hasta que ellos vienen a sacarlos y transportarlos en la noche para luego hacer su venta.

Estás hablando en serio, no puede ser que esa dulce anciana haga esto, se ve tan frágil, mi amiga me responde es un disfraz me dijo mi amigo el policía, usa esa vestimenta para no levantar sospecha, vamos debemos movernos de aquí antes de que nos impliquen en algo que no hemos hecho, apúrate.

Y así fue como la policía detuvo a la dulce anciana, que resultó ser la más buscada del país por el robo de los peces Koi y otras implicaciones junto a sus nietos y lo que era una dulce anciana, más bien era una mujer ruda de unos 50 a 55 años de piel tosca y porte africano.

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Greetings, this is my entry for the TopFiveFamily Observe Think Write contest

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Grandmother Koi

One hot afternoon, I was walking in the park and I observed what once was a fountain. At that time, it was colorful with lights around it, but now all those colorful lanterns were gone.

I looked and thought to myself what neglect from the authorities to let these things deteriorate instead of maintaining them in good condition.

As I was observing, an elderly lady approached with a small bottle. When she reached the fountain, she poured the liquid from the container.

My mind thought she came to pour water into this old fountain, and then the lady walked away.

I decided to keep walking, and suddenly I ran into a friend. As we engaged in a pleasant conversation, I observed the lady doing the same thing again, and the phrase "old habits" came to my mind.

After a few minutes, my friend invited me to sit on the bench near the fountain that used to be. While we talked about work-related matters, the old lady reappeared and poured the liquid into the fountain again. Intrigued, I pointed this out to my friend, abruptly interrupting her speaking.

"What's wrong?" my friend asked. I replied, "Watch that old lady; you'll see what she's up to."

The lady left, but she returned shortly. I told my friend she had been doing the same thing since I arrived, repeating the action. My friend humorously remarked that the lady probably wanted to fill the fountain bottle by bottle and chuckled.

I thought the same, but I pointed out to my friend that the fountain had a tube with a hole where the water came out.

"Let's wait until she leaves," my friend suggested. "Ok," I agreed. When the lady was gone, we approached the fountain, but we saw nothing. Suddenly, the lady appeared and said, "You came to see the little fish; I've been watching you."

"The little fish!" exclaimed my friend. The lady replied, "Yes, look closely, come closer, and you'll see."

We did as she suggested, and my friend said, "There they are, look at them swimming, they're so small."

Sure enough, there were a few little fish that the lady had brought to the fountain. They swam among the rocks there. I mentioned that they could die if the water dried up, but she assured me, "I don't think so; this pipe is connected to the city's main supply."

I asked her where she got the fish, and she said her grandchildren gave them to her.

We didn't dwell on that topic much, and my friend and I, now satisfied with the explanation, decided to bid farewell.

I stayed there admiring the fish, and my friend left. Some time later, the lady returned with her bottle and two colorful fish. I watched them swim in what was once a fountain, and I thought, "I wish there were more people like this grandma."

Just as I was about to leave, my friend arrived in a fluster. She told me she had found out where the old lady gets the fish from.

"Yes, she mentioned that her grandchildren gave them to her," I replied. But my friend continued, "No, further down there's a fair where they're exhibiting many fish that are quite valuable."

"I don't understand; where are you getting this about the fish?" I asked. She explained that on her way here, she met a police friend dressed in plain clothes who approached her and asked why she was with the 'grandma of terror.' She didn't understand his questions and told him we had coincidentally met and witnessed what the lady was doing, finding her actions quite lovely.

My friend replied to me, "You're crazy, she doesn't do any good deeds. We've been trying to catch her for some time now, and today will finally be the day. That sweet old lady you mention is actually one of the biggest mobsters in the country, along with her grandchildren trafficking Koi fish, which are then sold to foreign countries for a high sum of money, which she then uses to support her grandchildren in their vandalism.

If you stay there, you or your friend will be implicated as an accomplice. We are close to catching them. Her grandchildren are robbing everyone who buys Koi fish and handing them over to her.

Then she stores them there until they come to take them and transport them at night to later sell them.

Are you serious? It can't be that this sweet old lady is doing this. She looks so fragile." My friend replied to me, "It's a disguise," the police officer told me. She wears that outfit to avoid arousing suspicion. Come on, we need to get out of here before we get involved in something we didn't do. Hurry up.

And that's how the police arrested the sweet old lady, who turned out to be the most wanted in the country for stealing Koi fish and other offenses along with her grandchildren. What was once a sweet old lady was actually a tough woman around 50 to 55 years old with rough skin and an African appearance.

Translated and formatted with Hive Translator by @noakmilo.

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