No acostumbo a escribir las vivencias personales, todo lo contrario, las conservo en los recuerdos y cuando se reunen la familia o amistades, reviven aquellas experiencias emotivas.
Hace unos meses, me cambio la vida aquella noche donde se cruzo el designio de Dios y me nace en expresar este sentimiento resumido en pequeños parrafos.
Quien mas que yo se lo que es tener y contar con una familia. Pensamos que el tiempo no pasa o que cuando todos crecemos pensamos que el tiempo es mas lento, sin darnos cuenta que avanza mas de lo que nos imaginamos.
Nuestro mundo lo enfocamos en nuestra familia y al perder una de ella, no suele ser lo mismo, pues definitivamente algo cambia en ese mundo. El tiempo y Dios nos enseña a vivir bajo ciertas circunstancias pero lo cierto que falta algo. Es un dolor fuerte, la familia se acorta y la tristesa invade el corazón. Es natural pensar muchisimas cosas, es normal tener sentimientos encontrados, pero la vida es asi aunque no la entendamos.
Es difícil continuar, la vida y el alma esta destrozada pero es momento de ser fuerte y seguir con el proposito que tenemos cada uno en esta vida. No se como pero hay que hacerlo! Definitivamente la respuesta la tenemos nosotros mismos y la unica respuesta viable, es continuar con mucha fortaleza por ese camino que es la vida.