Oramos a un Dios PODEROSO! || We pray to a POWERFUL God!

We are constantly growing, day by day we grow in a closer relationship with our father, our faith increases, as does our trust and this leads us to ask differently.

Words of Nehemiah son of Hachaliah. It happened in the month of Chislev, in the twentieth year, while I was in Susa the capital of the kingdom, 2 that Hanani, one of my brothers, came with some men of Judah, and I asked them about the Jews who had escaped, who were left from the captivity, and about Jerusalem. 3 And they said to me: The remnant, those who are left from the captivity, there in the province, are in great trouble and disgrace, and the wall of Jerusalem is broken down, and its gates are burned with fire.
4 When I heard these words, I sat down and wept, and mourned for some days, and fasted and prayed before the God of heaven. 5 Then I said, “I pray you, O LORD God of heaven, the great and awesome God, who keeps covenant and loving-kindness with those who love him and keep his commandments; 6 let your ear be attentive and your eyes open to hear the prayer of your servant, which I pray before you now day and night for the children of Israel your servants; and I confess the sins of the children of Israel which we have committed against you; yes, I and my father's house have sinned. 7 We have acted exceedingly corruptly against you, and have not kept the commandments, statutes, and judgments that you commanded your servant Moses. 8 Remember, I pray, the word that you gave to your servant Moses, saying, ‘If you sin, I will scatter you among the nations; 9 But if you return to Me and keep My commandments and do them, though you be scattered to the ends of the heavens, I will gather you from there and bring you to the place I have chosen to make My name dwell there. 10 These are Your servants and Your people, whom You have redeemed by Your great power and by Your mighty hand. 11 Now, O LORD, please let Your ear be attentive to the prayer of Your servant and to the prayer of Your servants who desire to revere Your name. Please grant Your servant success and give him favor in the sight of this man. For I was the king's cupbearer.

Nehemiah 1.1-11

In this picture Nehemiah is a clear example of the power that exists in prayer directed to God, let us remember that he was the servant of the King of Persia and this did not give him the right to ask for permission, in this case for the reconstruction of the walls there in Jerusalem, much less to ask for help and request materials. But Nehemiah prayed to God whom he knew and consequently acted with courage.

Nehemiah began his prayer recognizing the magnificence of God, he prayed to God with the full certainty and security that God fulfills his promises and does so even in ways we do not imagine, Nehemiah said the following: "I pray to you, O Lord, God of heaven, strong, great and awesome, who keeps the covenant and mercy to those who love him and keep his commandments." This teaches us that Nehemiah knew God and was confident that God fulfills his promises.

We know "By the word of God" That God is omnipotent, creator of heaven and earth, Nehemiah was totally sure that God would fulfill all that he had promised, in the same way it is with us today, through the word of God we know God and he does everything by and for us, his children, we must trust.

God has made it very clear in the Bible who he is, what he did and what he will do, we can get to know God a little more every day and this increases our faith and trust in the Creator God, in this way in each prayer we will present ourselves with total confidence and security, in need, in confusion we have clarity and confidence in God, let us remember that the way we contemplate God is the way we will address him.

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Estamos creciendo constantemente, día tras día crecemos en una relación mas cercana con nuestro padre, nuestra fe aumenta, así también la confianza y esto nos lleva a pedir diferente.

Palabras de Nehemías hijo de Hacalías. Aconteció en el mes de Quisleu, en el año veinte, estando yo en Susa, capital del reino, 2 que vino Hanani, uno de mis hermanos, con algunos varones de Judá, y les pregunté por los judíos que habían escapado, que habían quedado de la cautividad, y por Jerusalén. 3 Y me dijeron: El remanente, los que quedaron de la cautividad, allí en la provincia, están en gran mal y afrenta, y el muro de Jerusalén derribado, y sus puertas quemadas a fuego.
4 Cuando oí estas palabras me senté y lloré, e hice duelo por algunos días, y ayuné y oré delante del Dios de los cielos. 5 Y dije: Te ruego, oh Jehová, Dios de los cielos, fuerte, grande y temible, que guarda el pacto y la misericordia a los que le aman y guardan sus mandamientos; 6 esté ahora atento tu oído y abiertos tus ojos para oír la oración de tu siervo, que hago ahora delante de ti día y noche, por los hijos de Israel tus siervos; y confieso los pecados de los hijos de Israel que hemos cometido contra ti; sí, yo y la casa de mi padre hemos pecado. 7 En extremo nos hemos corrompido contra ti, y no hemos guardado los mandamientos, estatutos y preceptos que diste a Moisés tu siervo. 8 Acuérdate ahora de la palabra que diste a Moisés tu siervo, diciendo: Si vosotros pecareis, yo os dispersaré por los pueblos; 9 pero si os volviereis a mí, y guardareis mis mandamientos, y los pusiereis por obra, aunque vuestra dispersión fuere hasta el extremo de los cielos, de allí os recogeré, y os traeré al lugar que escogí para hacer habitar allí mi nombre. 10 Ellos, pues, son tus siervos y tu pueblo, los cuales redimiste con tu gran poder, y con tu mano poderosa. 11 Te ruego, oh Jehová, esté ahora atento tu oído a la oración de tu siervo, y a la oración de tus siervos, quienes desean reverenciar tu nombre; concede ahora buen éxito a tu siervo, y dale gracia delante de aquel varón. Porque yo servía de copero al rey.

Nehemías 1.1-11

En este cuadro Nehemías es un claro ejemplo del poder que existe en la oración dirigida a Dios, recordemos que él era el siervo del Rey de Persia y esto no le daba derecho para pedir permiso, en este caso para reconstrucción de los muros allí en Jerusalen, mucho menos para pedir ayuda y solicitud de materiales. Pero Nehemías oró a Dios a quien conocía y en consecuencia actuó con valentía.

Nehemías comenzó su oración reconociendo la magnificencia de Dios, él oró a Dios con la plena certeza y seguridad que Dios cumple sus promesas y lo hace aún de maneras que no imaginamos, Nehemías dijo lo siguiente: "Te ruego, oh Jehová, Dios de los cielos, fuerte, grande y temible, que guarda el pacto y la misericordia a los que le aman y guardan sus mandamientos". Esto nos enseña que Nehemías conocía a Dios y tenía seguridad en que Dios cumple sus promesas.

Sabemos "Por la palabra de Dios" Que Dios es omnipotente, creador de los cielos y la tierra, Nehemía tenía la total seguridad en que Dios cumpliría todo lo que había prometido, de la misma manera es hoy con nosotros, por medio de la palabra de Dios conocemos a Dios y todo lo hace por y para nosotros sus hijos, nosotros debemos confiar.

Dios ha dejado bien claro en la biblia quien es, que hizo y que es lo que hará, podemos conocer cada día un poco mas a Dios y esto aumenta nuestra fe y confianza en el Dios Creador, de esta manera en cada oración nos presentaremos con total confianza y seguridad, en necesidad, en confusión tenemos la claridad y confianza en Dios, recordemos que de la manera que contemplamos a Dios es la manera en que nos dirigiremos a él.

Muchas Gracias por compartir esta lectura, deseo que el Espíritu Santo de Dios traiga revelación de su palabra a nuestras vidas.