Eso por Stephen King. Una de las cosas por la me gusta el género del terror; tanto en libros, como en películas, esencialmente es por sus escritores y directores, que orientan su narrativa hacia ello de forma magistral. Un ejemplo fabuloso son las novelas que nos ofrece el rey del terror Stephen King; indudablemente este autor siempre nos deja satisfecho con todas sus creaciones. Es más; me ha encantado leer varios de sus libros, por ese toque en la narración; y es como si él mismo estuviera contando la historia de una forma directa, lo que hace que el texto sea súper atractivo y el lector se interese por continuar pasando página tras página.

Si hablamos de sus obras, he disfrutado el terror psicológico de El resplandor y Miseria. Por otra parte; el autor tiene la habilidad de presentar personajes que parecen reales y comunes; por lo que nadie podría pensar, que al estar cerca de nosotros, se trataría de elementos que llevan consigo el horror. Tal es el caso del libro que les presento hoy; y este no es más que IT. Hablamos de ese payaso Pennywise que parece inofensivo, pero que realmente se alimenta del miedo de las personas, especialmente de los niños. Debo recalcar; que este libro fue tan bueno, que me inspiró a ver todas las películas y actualmente estoy disfrutando de la serie; lo cierto es que el libro es bastante largo, pero pude culminarlo por lo interesante y adictivo que es.

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Esta obra literaria es bastante extensa y no solo es el reflejo de un simple payaso que se alimenta de los niños; ya que además de eso, nos relata lo difícil que puede ser la infancia y más difícil aun, enfrentar los miedos que sienten los niños. En tal sentido, ese payaso Pennywise; desde mi punto de vista, viene siendo una figura construida a partir de todos esos miedos, ya sean colectivos o personales. Por ello; en Derry existe una entidad que se alimenta de ese miedo y destruye esa infancia.

Ahora; dentro de la historia tenemos a esa infancia reflejada en el Club de los Perdedores, que lo integran 7 niños marginados, acostados, cada uno con limitaciones particulares; pero con una lazo de amistad increíble. Ellos son valientes cuando están juntos y precisamente son quienes se enfrentan a la maligna entidad. Por otra parte; es válido mencionar, que el libro divide la trama en dos etapas y es primordial entender esto, porque vamos a vivir momentos de la infancia y de adultez. Esto es necesario; porque el escritor nos invita a reflexionar, que muchas veces el pasado no se olvida de ninguna manera.

En este pueblo; los adultos están como resignados a que ocurran estos hechos macabros; para ellos pareciera algo normal, lo que hace vulnerable a los niños quienes están bajo las garras del payaso diabólico. Este payaso siempre tiene la ventaja sobre ellos; porque puede presentarse de cualquier forma, específicamente puede aparecer de aquello a lo que los niños tienen. Sencillamente; IT sabe que el miedo de cada niño hace que se paralicen y de esta manera consume fácilmente el cuerpo, el alma y la esperanza de cada uno de ellos.

Poco a poco; los integrantes del club van creciendo y se alejan de Derry. Al parecer con ello, se pierde todo pensamiento de aquella niñez perturbadora, es como si la mente se hubiera borrado por completo y ninguno piensa en el terror que vivieron ellos y sus compañeros. Sin embargo; pienso que nada se ha olvidado y que solo actúan así como una manera de defenderse por aquel pasado abrumador que tuvieron en sus vidas. De verdad que esta novela relata detalles perturbadores y fuertes que no aparecen en la película; por ello digo que todo el terror y abuso que vivieron esos niños, jamás pudieron olvidarlo y ya adultos lo volvieron a sentir. Por ejemplo; tenemos a Bev, que de niña fue abusada por su padre y ya de adulta, corrió con la misma suerte con su esposo; en tal sentido, solo han pasado los años y el terror sigue latente.

Ya todos son adultos y es aquí donde observamos la siguiente etapa del libro; han transcurrido 27 años, hay que regresar a Derry, con ello vuelve el terror del pasado e inevitablemente deben enfrentarse no solo al payaso; sino a lo que se han convertido, aquí vamos a ver nuevamente esa fuerza que los unió en la etapa infantil. Esto demuestra, que aunque pasen los años, el amor que se sienten cada uno de ellos, es una razón muy fuerte para enfrentar y vencer cualquier maldad. De igual manera; este libro nos invita a analizar la forma como los adultos tratan a los niños y en ocasiones; el mal no está encarnado en el payaso, sino que está dentro de los propios padres que maltratan y abusan de sus hijos. La mayoría de las veces el terror no se refleja en un monstruo, sino en la persona; saludos y nos vemos pronto.

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