Hada danzante entre las rosas
bella, graciosa y fulgurante
luna radiante que a ella envidias
rayos de plata que la iluminan.
Diosa amorosa con su perfume
Ojos inquietos que me escudriñan
Siempre de niña me acompañaste
Cuentos, canciones, mil enseñanzas.
Pocos comprenden tu dulce alma
que se despierta cada mañana
en el trajín del alborozo
de ver crecer su propia esencia
miles de risas en campanadas.
Una centena de mariposas
vuelan ansiosas con mucho afán
hasta tu encuentro hada del pan
la mermelada con la tostada
el maíz tierno para la chica
y la arepita que entre tus manos
en montoneras se va agolpando
y el niño chico la ve llegando
cual avioncito hasta su boca.
Mamá graciosa, mi dulce hada
magia encantada
ángel guardián
que a la vida sabes cuidar.
Mamá gigante! ser prodigioso!
todo es hermoso en tu presencia
Eres la luz para el camino
el latir de un buen destino
eres la fe que me alimenta.
Gracias por leerme!
