[Esp-Eng] Me gusta Mark (Relato de venganza)

Me gusta Mark. Es más joven que mi esposo y mucho más atractivo, sin duda. Su cabello es sedoso y suave, lo toco con la mano y me delito, seguramente no hace muchos esfuerzos por cuidarlo, pero eso es un beneficio de la juventud. Los ojos de Mark, son verdes, pero cuando hay luz solar se hacen más intensos y pequeñas motas de color miel aparecen. Sus manos son fuertes y eso me gusta, necesito que lo sean. Tiene veinticinco años, la misma edad que yo tenía cuando me casé con Cliff.

Amaba tanto a Cliff, lo nuestro era el “felices por siempre” perfecto. Él es un hombre guapo, clásico, de porte elegante y mucha clase. Es un excelente líder y sí, también es un manipulador de primera. Todos siempre le creemos a Cliff, y si no le creemos a él, le creemos a su dinero.

Veinte años de casados, una familia, una fortuna construida juntos. Cliff era el amor de mi vida, pero parece que una vida era demasiado tiempo para él.

Mark y yo caminamos por el corredor de mi mansión, su cuerpo robusto es pesado, pero fornido y me da fuerza y seguridad. Me siento poderosa con él, la conexión que tenemos es perfecta y única. Soló Mark pudo verme aquella noche de invierno, hace unos meses, no he querido separarme de él desde entonces, y ahora finalmente estamos aquí, en mi casa, el lugar al que necesitaba traerlo.

Abro la puerta de mi habitación y Cliff está allí, su rostro se congestiona cuando ve a Mark, está confundido y sé que molesto también. Él no entiende nada, no sabe lo que he estado haciendo estos meses. No tiene idea de quién es Mark porque no sabe nada de él y yo.

-¿Quién diablos eres y qué haces aquí? –pregunta irritado. No le gusta que ningún extraño entre a la casa. Si supiera cómo lo he estado rondando todos estos meses…

Entonces ella sale del baño, la chica rubia perfectamente joven y sexy por la que él perdió la cabeza, la que susurraba cosas a su oído y lo convenció de cometer locuras, la chica por la que él me asesinó.

El odio y la rabia hierven en mí como un río furioso de agua caliente. Siento como la sangre de Mark corre por sus venas y me deleito nuevamente con el sabor de un cuerpo vivo. Cliff y su amante observan a Mark, están alterados por su presencia y son unos tontos, porque si miraran cuidadosamente, sabrían qué me están viendo a mí.

Mi amado Cliff fue quien me empujó por el balcón aquella tarde, el día que morí. ¿Por qué lo hizo? ¿Por qué el amor de mi vida me había asesinado sin más? La respuesta la vi entrar caminando por la puerta de mi casa unas semanas después de mi funeral. Unas piernas largas y un trasero perfecto.

Le agradezco a la divinidad por dejarme quedarme un poco más, porque mientras deambulaba Mark me vio y aunque el espanto que le causé le hizo daño, no me alejé de él por los siguientes meses, atormentando dolorosamente su pobre vida. Me gusta Mark, porque su apariencia es sólida, pero su alma es tan débil que después de llevarlo a la locura pude finalmente adueñarme de su robusto cuerpo y traerlo aquí, a mi vieja casa.

Mark es tan fácil de controlar que siento como si fuera mío, no hay rastro de él, ni de resistencia así que tomo el cuchillo que he traído de su casa y lo levanto amenazadoramente.

-Soy yo cariño. –la voz ronca de Mark arrastra mis palabras aterradoramente cuando un rayo ilumina la oscuridad y un trueno rompe la noche. –Vine a despedirme.

Empujo toda la juventud y la fuerza de este cuerpo sobre ellos y no dejo de acuchillar hasta que el brazo de Mark no puede más. Hasta que me siento satisfecha. Hasta que la sangre se ha extendido hasta las esquinas de la habitación.

Sonrío y es malévolo.

Pero una vez que mi deseo ardiente de venganza es consumado empieza el calor, el fuego, las llamas me acarician violentamente. Sé lo que está pasando, no suplicaré perdón, solo pediré misericordia por Mark, porque no fue su culpa. Así que mientras el fuego me arrastra a lo profundo y me consume invoco mi última plegaria.

Dios o demonio que me escuchas, él es buen chico, humilde y tan noble que me dejó aprovecharme de él, perdónalo, porque me gusta Mark.