Que chévere que los niños tenga este espacio de disfrute y aprendizaje, por allí se escucha el carrito de helado.
Estoy segura que van a atesorar estos momentos en sus memorias.
Que chévere que los niños tenga este espacio de disfrute y aprendizaje, por allí se escucha el carrito de helado.
Estoy segura que van a atesorar estos momentos en sus memorias.
Seguro que si mi bella, yo trato en lo posible de involucrarlos o incluirme en sus actividades, así se sienten como seguros, luego parecen unos cotorros hablan y hablan hasta antes de dormirse del tema, ese carrito de helado se fue lejos jajajaja quedo pendiente para otra ocasión no muy lejana. La quincena de papa.