Así debe ser, uno no puede pegarle o castigar a su hijo por que otro dice, mucho menos dejarle, así ese otro sea su abuelo o tío, ya que luego creceran creyendo que los padres se basan en las decisiones de otros y no en ls suyas propias, llevándoles a ser personas faltas de determinación, autoestima e indecisas.
El padre debe corregir al hijo por que hizo mal y felicitarlo cuando lo hace bien, no por lo que otro diga o piense.