Hoy te invito a que me acompañes a un paseo gráfico para conocer a través de las imágenes otro de los pequeños pueblos del interior de Portugal, la tranquila cuidad de Mangualde.

Así nos recibía este pueblo colorido y pacífico, con un cielo nublado, pero que a medida que pasaban los minutos se desprendía de los grises y las nubes para regalarnos brillo, azules intensos ya mitad del día.

Nuestro recorrido empezó en el centro del pueblo, allí nos maravilló esta arquitectura medieval con estos pequeños edificios o casitas de varios pisos y grandes ventanales, sacados de una postal de cuentos, me hace evocar una especie de mezcla entre casonas de los pueblos o viñas francesas y alemanas. ¿A ti a qué te recuerda?

Casi todos estos edificios, están ocupados por entes oficiales del gobierno nacional y local, uno que otro local, se usa como cafetería o panadería.

A un par de calles después y a medida que nos acercamos a una zona residencial, observamos ya edificios con arquitectura más contemporáneos.

Desde las alturas el panorama se pone más lindo y colorido, ¿no me crees?, ya te muestro.

¿Ves en la última foto anterior esa larga avenida con un pico o montaña y una especie de torre o antena que se eleva al cielo?
No dejes de seguir la segunda parte de este post, porque a esas alturas nos dirigimos como destino final en esta aventura en Mangualde.
Larga subida y un sin fin de escalinatas nos esperan, pero seguro que la vista es inigualable y spectacular.

Si llegaste hasta aquí y disfrutaste de mi post o si tienes alguna pregunta, estaré encantada de leer tus comentarios.

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