Jesús Candelario: El Vendedor de Crucifijos

Saludos Hivers todos ✨ y en especial a quienes navegan en la Comunidad @freewriters 🫂 ante la cual hoy me presento por primera vez con un post, que espero resulte de vuestro agrado y agradezcan, pues no habla de mí, sino de otro escritor.

Desde que entré el mes pasado a Hive, me propuse hablar cada sábado de un poeta al que admire por su obra, y que me haya resultado muy cercano, pues hoy presentaré a Jesús de la Caridad Candelario Alvarado ⬇️

Natural de Cruces, en la provincia de Cienfuegos en Cuba, nació el 9 de enero de 1959 y se graduó como Licenciado de Pedagogía en la Especialidad de Lengua Inglesa. Actualmente es Profesor Universitario de Estilística, Literatura Inglesa y Norteamericana, y de Práctica Integral de Idioma.

LA TRISTEZA ES CULPA DE LAS NOVELAS fue su primer cuaderno de poesía, publicado en formato de plaquette, al que le siguieron luego los poemarios 📚 :

Vendedor de Crucifijos
Sobran los Poetas
Presidente de mi soledad

Se trata la suya de una poética coloquial, anticonvencionalista, de dejo irónico y con vocación humanística, en diálogo a veces con otros autores, pero sin dejar de introducir elementos de su autobiografía.

Y en narrativa ha publicado hasta la fecha:

Breve Filosofía de los Huecos
Los Anormales son Invisibles
Dios no tiene teléfono

Los tres son 📕 de Cuentos.

Pero dejemos que mejor hable de Candelario su propia obra ✨

---

SELECCIÓN DE 2 POEMAS DE SU AUTORÍA

---

COMO SI FUERA UN EN-SAYO
PARA QUIEN LE SIRVA EL SAYO

Era un poema sin voz
y la voz no aparecía.
Rimó con la poesía
pero la rima fue atroz.
Hizo de un poema, dos.

Se partió el poema en dos.
La rima fue tan atroz
que ahuyentó a la poesía
y la voz no aparecía:
era un poema sin voz.

Del 📕 SOBRAN LOS POETAS

_{El autor, al lado de su coterránea, la escritora crucense Judith Martin, en su peña de la Uneac.}

EJERCICIO DE ASESINATO

Ayer maté a un hombre que gritaba y no me duele su muerte.

Estoy molesto, triste, porque no escucho el grito. El silencio duele más que la muerte.

Creo maté mi voz con el grito de ese hombre, mejor callar para no tener que escuchar este lamento.

No me duele su muerte, no escucho su grito, mejor callar para no escuchar ese lamento.

No duele su muerte, es su grito, es la falta que me hace ese grito. Mejor callar para no ser el asesino que le robó su grito.

Del 📕 inédito: MANUAL PARA NO CREER EN LA HISTORIA

_{Aquí me verán, a su lado, en la Librería Ateneo Diosinisio San Román de Cienfuegos, durante una presentación de la revista cultural ARIEL en el 2001.}

---

_{Post libre de IA.
📷 TODAS de mi propiedad.}

---