Un día estaba hablando con unos amigos cuando alguien dijo en broma ¨Me gustan las chicas con depresión porque son más fáciles de enamorar¨ al oír eso quedé paralizada, mi mente pensó mil cosas a la vez y no pude dar una opinión. alguien más dijo ¨No comprendo el por qué la gente se deprime, hay muchas razones para ser feliz, solo hay que vivir bien¨. Honestamente, no sé cual de los dos comentarios me parece peor, hoy en día me arrepiento de no haber dicho nada en el momento.
Lo primero que pensé al escuchar esos comentarios fue ¨Solo aquellos que hemos pasado por eso podemos comprenderlo¨ y lo segundo fue ¨Si jamás han pasado por algo similar es obvio que no entenderían como es, me alegra que hayan podido vivir una vida con una mente tranquila¨
¿Alguna han sentido que su mente realmente descansa? porque en lo personal desconozco esa sensación, mi mente siempre esta alerta, incluso cuando duermo sueño y me despierto durante la noche, solo cuando estoy realmente agotada mi cuerpo se tumba por completo y al despertar siento como si hubiera regresado de la muerte, mi cuerpo se siente pesado y mi mente confundida. Durante años, desde que tengo memoria podría decir mi mente ha hecho de todo para hacerme sentir mal, y no he podido encontrar como combatirla y ganar la guerra, solo lo he hecho con algunas batallas.
Uno de los mejores métodos que he conseguido para sobrellevar mi vida ha sido escribir, tengo un cuaderno en donde escribo cada vez que me siento mal o cuando siento que necesito soltar algo, con el tiempo descubrí esta plataforma y pensé en escribir aquí, y es que, otra forma de sentirte mejor es saber que alguien alguien que se siente igual o incluso peor que tú (aunque suene mal, lo suena y lo sé) y tal vez alguien al leer esto se pueda sentir mejor, sentir que no está solo, saber que hay alguien más en alguna parte del mundo que la esta pasando mal y sigue ahí escribiendo para dejar un poco de ese malestar salir.
Desde hace años un nuevo pensamiento llego a mi mente ¨No estoy viviendo, estoy sobreviviendo¨ y eso desató muchas cosas más. A veces suelo pensar que odio mi vida, y luego me odio por odiarla y por no querer vivir, debería ser agradecida por lo que tengo y no querer algo más en especial cuando sé que es algo que no puedo tener, eso es otra cosa, mi mente me dice que no merezco nada, recuerdo constantemente las veces en las que fui mala y las cosas que no debí hacer o que debí hacer y no hice. Cada año me prometo ser mejor pero siento que jamás lo cumplo, mi felicidad es momentánea y ni siquiera la disfruto, solo vivo recordando el pasado pensado ¨Debí haberlo disfrutado más, me debí haber sentido más feliz, debí ser más consciente de ese momento y ahora ya es tarde¨. El año pasado fue uno en el que podría decir que tuve algún avance, conocí más personas, salí más, me reí y me divertí más, pero ahora me doy cuenta de que ni aún así estoy mejor, cuando mi mente ya no tiene distracciones vuelve a su estado natural y me recuerda lo patética que soy.
No sé si ya me acostumbré a vivir así o si es que ya lo acepté pero ahora el dolor y la tristeza se han vuelto más tolerables, aunque sonría están siempre presentes pues ya aprendí a disimularlo, como un robot que aprende a imitar emociones, parece que estoy viva pero me siento muerta por dentro. Aún así, hay algo más, una parte que amo y odio de mi y es esa parte que no se quiere rendir, esa parte que sigue teniendo la esperanza de que algún día me permitiré ser feliz, una parte de mi cree que ¨La luz de la luna y las estrellas es más hermosa porque se rodean de oscuridad¨.