[ENG / ESP] Fantastic Tales of Almaerum / Relatos Fantásticos de Almaerum

Welcome to Almaris, a continent of contrasts and mysteries. To the south, an intense cold surrounds dead forests and frozen valleys. To the north, the warm climate gives life to lush forests, majestic mountains, calm lakes and a mine full of riches. To the west, at night a beautiful but dark forest, and to the east, the large and unexplored sea of Arum.

Almaerum used to be a peaceful land with crystal clear rivers, sparkling lakes, green mountains and lush fields. This country, located north of the Frozen Valleys, was known for its natural beauty and peace, the capital was surrounded by a wall and some watchtowers to keep away the wild animals that roamed through the forest and the plains.

It had been hundreds of years since the city had received an attack from the savages from the South, and that was because the last ruler established a law that allowed those from the South to enter the city and trade, even work in the markets and the taverns. In this way, any type of conflict was avoided.

To the north of Almaerum rise the imposing Hizzt Mountains, green and colossal. In the bowels of it, there is a mine that is the main source of income for the region, and near it, the peaceful Kalum Lake.

To the west, the Alin forest, lively during the day but mysterious at night, fills the proximity of the city with freshness. A few minutes from Almaerum are two towns, Runn to the west and Mirn to the east, next to the ruins of ancient Mirn further east, destroyed hundreds of years ago.
To the east, the Arum Sea, vast and unexplored. What will be beyond? Maybe other worlds, civilizations or just nothingness itself?

This is the great mystery. And there's always someone curious enough to figure it out. And that person is me, Barnabas. This is my world, which one that has lived in my mind for a long time, with landscapes, life, death, good and evil.

Barnabas lived in the capital, in Almaerum, near the Hizzt Mountains, far to the north. He worked in a tavern at night and explored during the day. Although many said that he already knew everything about Almaerum, he was aware of that there was always something new to discover.
In taverns you hear many stories, but few are true. Barnabas dedicated himself to investigating them, traveling to the mentioned places and looking for clues. His tireless spirit made him special.

One night, a fisherman mentioned traveling so far west that he found only water and more water. Barnabas didn't believe it. He always thought there was something beyond the Arum Sea and he was willing to discover it.
To do this, he needed to save money, get a boat and supplies. His adventure was about to begin.

This series will be called Fantastic Tales of Almaerum. It will be a compilation of Barnabas' experiences, including ancient stories from his childhood and, possibly, his journey beyond the Arum Sea. Join us on this incredible adventure.

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Bienvenidos a Almaris, un continente de contrastes y misterios. Al sur, un frío intenso envuelve bosques muertos y valles congelados. Al norte, el clima cálido da vida a frondosos bosques, majestuosas montañas, lagos serenos y una mina repleta de riquezas. Al oeste, un bosque hermoso pero tenebroso de noche, y al este, el vasto e inexplorado Mar Arum.

Almaerum solía ser una tierra tranquila y pacífica, con ríos cristalinos, lagos resplandecientes, montañas verdes y campiñas exuberantes. Este país, situado al norte de los Valles Congelados, era conocido por su belleza natural y su tranquilidad, la capital estaba rodeada de una muralla y algunas torres de vigilancia, pero estas eran utilizadas para mantener a raya a los animales salvajes que se paseaban por el bosque y las llanuras.

Hacía cientos de años que la ciudad no recibía un ataque de los salvajes del Sur, y eso se debía a que el ultimo gobernante, estableció una ley que le permitía a los del Sur, ingresar a la ciudad y comerciar, incluso trabajar en los mercados y las tabernas. De esta forma se evitaba cualquier tipo de conflicto.

Al norte de Almaerum se alzan las imponentes montañas Hizzt, verdes y colosales. En sus entrañas, se encuentra una mina que es la principal fuente de ingresos de la región, y cerca de ella, el tranquilo lago Kalum.

Al oeste, el bosque Alin, lleno de vida durante el día, pero misterioso de noche, llena de frescura la cercanía de la ciudad. A pocos minutos de Almaerum, se hallan dos pueblos, Runn al oeste y Mirn al este, junto a las ruinas del antiguo Mirn más al este, destruido hace cientos de años.

Al este, el Mar Arum, vasto e inexplorado. ¿Qué habrá más allá? ¿Otros mundos, civilizaciones, o solo la nada misma?

Este es el gran misterio. Y siempre hay alguien lo suficientemente curioso para resolverlo. Esa persona soy yo, Barnabas. Este es mi mundo, un mundo que vive en mi mente desde hace mucho tiempo, con paisajes, vida, muerte, bondad y maldad.

Barnabas vivía en la capital , en Almaerum, cerca de las montañas Hizzt, bien al norte. Trabajaba en una taberna por las noches y exploraba durante el día. Aunque muchos decían que ya conocía todo Almaerum, él sabía que siempre había algo nuevo por descubrir.

En las tabernas se escuchan muchas historias, pero pocas son ciertas. Barnabas se dedicaba a investigarlas, viajando a los lugares mencionados y buscando pistas. Su espíritu incansable lo hacía especial.

Una noche, un pescador mencionó haber viajado tan al oeste que solo encontró agua y más agua. Barnabas no lo creyó. Siempre pensó que algo había más allá del Mar Arum y estaba dispuesto a descubrirlo.

Para ello, necesitaba reunir dinero, un barco y provisiones. Su aventura estaba a punto de comenzar.

Esta serie se llamará Relatos Fantásticos de Almaerum. Será una recopilación de las vivencias de Barnabas, incluyendo historias antiguas de su niñez y, posiblemente, su viaje más allá del Mar Arum. Acompáñanos en esta increíble aventura.

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