Qué difícil digerir esta historia, porque hay tanta verdad cruda que para personas sensibles (como en mi caso) es bastante fuerte; me parece que tienes una fortaleza espiritual como muy pocas personas lo tienen, lo único que debes saber ahora, es que el dolor es el mejor escudo, no huyas de él, vívelo, siéntelo, y deja que se impregne en ti y se vuelta tu armadura.
La vida es un eterno equilibrio y a veces, tenemos momentos difíciles que creemos que son eternos, pero ni la felicidad ni el dolor son eternos, y por eso debemos disfrutarlos en cada momento, porque la felicidad es deliciosa y el dolor es un cúmulo de grandes enseñanzas.
Te admiro y te extiendo una mano amiga por si un día necesitas hablar, no estás sola, tu lucha es la de muchos que leerán esta historia y te van a extender la mano, gracias por mostrarnos un pedazo de tu alma y te deseo lo mejor de todo corazón, las tormentas pasan y aunque dejen escombros, de los cimientos nacen los grandes edificios.
Dios mío, qué comentario tan hermoso. Me llegó al alma, muchas gracias :')
Y respecto a lo que dices, cada día intento aprender de cada cosa que por mi cabeza pasa para darle la vuelta e intentar dejarlo ir si no me sirve. Es rudo, pero eso es lo que nos construye a nosotros los fuertes jajajaja.
Hace poco entendí que la evasión no es la solución, entonces el dolor debe vivirse, como dices. No hay otra forma. :)
Me encantó lo de que de los cimientos nacen los grandes edificios. Buena analogía, como el ave fénix.
Gracias por comprender. Aprecio mucho todo lo que escribiste.