Hoy desperté imaginando un mundo son maldad, con personas diferentes. Y me preguntó ¿como es que llegamos a esto? Si somos todos seres humano, seres vivos que respiramos un mismo aire y pisamos un mismo suelo. Porque se nos dificulta tanto dialogar con las otras personas, evitaríamos tantos problemas y conflictos si tan solo practicaramos el maravilloso arte de hablar, pero con respeto y amor dejando a un lado el odio y rencor.
Siempre me preguntó qué piensan las personas cuando les hacen daño a otras. Cómo es que son capaces de ponerle fin a una vida que ellos no crearon, o causarles traumas a individuos que a veces ni siquiera pueden superar; sin importarles el sufrimiento que dejan con sus actos. Si somos capaces de razonar porque no lo hacemos y evitamos las desgracias.
El mundo está así por nosotros mismo, nos creemos jueves, somos verdugos y si no paramos esto no va a cambiar y cada día se verá más maldad en el mundo, y eso es lo que aprenderán nuestros hijos y sus hijos y los hijos de sus hijos.
El cambio está en nuestro interior y cómo personas podemos hacer que todo sea diferente y juntos podemos crear un mundo diferente.