La Cultura del Amor | The Culture of Love

A veces, no todo el tiempo, hay salvedades, como dice el dicho popular “no todos son cortados por la misma tijera”, siempre hay un pequeño porcentaje que rompe el molde, el 1% del 1%, pero si hablamos de estadísticas y estudios especializados, la denominada “Cultura del amor” está presente hasta en los rincones más incógnitos del mundo, la música, el cine, la literatura, las fantásticas leyendas que te hablan de idilios, sacrificios de amor, el compromiso, palabra de honor, el matrimonio, juntos hasta que la muerte los separe, el más profundo enamoramiento por la eternidad y los finales felices, te incitan a seguir el camino correcto, el deber ser, la verdadera felicidad, la familia como base de la sociedad, enhorabuena por quienes logran el bienestar bajo ese patrón inducido por el sistema, la religión y el manual de lo generalmente aceptado.

Son medias verdades, mentiras sostenidas por el temor al escarnio público, la doble moral, los secretos a voces, las bajas pasiones. Generación tras generación han surgido visiones revolucionarias que buscan escapar de los arquetipos, o tal vez traten de justificar sus estilos de vida al margen de los mandamientos, sacramentos, valores y principios morales ancestrales y conservadores.

Lo que intento decir con esta obra es que siempre hay oportunidad para dominar la situación, anteponerse a la adversidad, salir del paredón de los señalados o incluso, posar sonriendo para la fotografía de los llamados “desdichados”, tal vez, mucho más infeliz es el fotógrafo que finge ser quien no es.

Los invito a verse en el espejo, hacer un ejercicio de introspección y llegar al punto, mientras haya vida hay obstáculos, hay que aprender a vivir con ellos o morir en el intento, a fin de cuentas, cuando ya no estén, producto de sus propios demonios, si es el caso, pues, el mundo seguirá girando, algunos aprenderán a salir airosos de los cataclismos predecibles y otros respirarán un día igual que el anterior, decidan de qué lado quieren estar, gracias.

Esas fueron las palabras casi exactas del filósofo contemporáneo Benardito Cajiga, las recuerdo como ayer, fue la primera conferencia de esta índole que cubrí en mi trabajo como periodista de la sección de bienestar del periódico “Un Nuevo Día”. El letrista presentaba su libro “La Cultura del Amor” en medio de una fuerte polémica producto de la separación de su esposa, tras 20 años de matrimonio y dos hijos en común.

El libro, bajo mi criterio, es una oda a la sinceridad, habla de dos escenarios, por un lado, hacer ejercicios de meditación, oración, ayuno intermitente y otras prácticas para controlar las tentaciones y sentir la victoria de llegar a puerto seguro tras remar en aguas turbulentas, y la estación opuesta, aferrarse a la sabia reflexión de que “errar es de humanos” para justificar las debilidades ante algunos placeres culposos, sí, culposos según la sociedad prejuiciosa.

Ese día, había tensión en el salón dónde se llevaba a cabo la rueda de prensa del lanzamiento, pues se decía que una de las periodistas presentes era la causante de la separación entre el escritor y su esposa, eso no es todo, el romance fue fugaz, y la mujer, 20 años menor, había dejado a Bernardito Cajiga sumergido en una profunda crisis existencial, y no es para menos, dejó una relación de años por una aventura que duró lo mismo que un suspiro.

Yo, como soy pro amor, pro telenovela, pro Disney, pues, a veces me creo todo, es que me cuesta comprender que todo sea parte de una estrategia de marketing para posicionar un producto.

Lo cierto es que la susodicha, la presunta amante, se levantó para hacer sus preguntas, como le correspondía: ¿No cree usted señor Cajiga, que sus reflexiones aquí plasmadas en la denominada “Cultura del amor”, es sólo su punto de vista y no representa la verdad absoluta?, tal vez usted intente, como su dominio del lenguaje, su reconocimiento, su poder de convencimiento, masificar una idea y la realidad es que, no porque sea lógico para usted, es lógico para los demás, la verdad es relativa, no debería usted proyectar su personalidad en el mundo.

El Señor Cajiga respondió: Sí, es mi punto de vista, es que, si hablo del punto de vista de alguien más, no sería yo, no tendría sentido escribir un libro sin ideas propias, lo que no me queda claro, es si me hiciste una pregunta o es una afirmación, en caso de ser la segunda, mi respuesta espero haya cumplido con tus expectativas y solo voy a hablarte de mí vecindario, son más los divorcios que los matrimonios y dentro del matrimonio hay un equilibrio entre buenos y malos momentos, dice la sabia frase: “Lo que no nos mata nos hace más fuertes”… gracias, siguiente en preguntar.

En ese momento entendí, que ahí hubo fuego, y pues, dónde hay fuego alguien poder sufrir quemaduras que dejen cicatrices difíciles de borrar.

Volviendo al libro, cambió mi paradigma, entendí a través del testimonio de Cajiga, que para el amor soy un gitano, “aprovéchame que si llegué ayer me puedo ir mañana” es que necesito compañía y cuando la tengo quiero estar solo, me hago la víctima y soy victimario, es difícil pedir perdón, y bueno, no he cambiado, pero antes de Cajiga no sabía cómo definirme, ahora sé quién soy y “lo que soy es real, soy exactamente lo que quiero ser hoy”.

“La Cultura del amor” en poco tiempo fue Best Seller y referencia en materia de relaciones amorosas por su visión naturalista, Bernardito se dedicó a dar conferencias como coach en bienestar integral y terapia de pareja, de su vida privada se sabe poco, creo que se dará las oportunidades en el amor que sean necesarias, porque de lo contrario no predicaría con el ejemplo, por mi parte, hoy saldré con alguien que conocí en la nueva app de Facebook para ligar, me tomaré unas copas y seguro terminaré retozando porque me apetece, no voy a ser tan mojigato.

Sometimes, not all the time, there are exceptions, as the popular saying goes "not all are cut by the same scissors", there is always a small percentage that breaks the mold, 1% of 1%, but if we talk about statistics and specialized studies, the so-called "Culture of love" is present even in the most unknown corners of the world, music, film, literature, the fantastic legends that tell you about idylls, sacrifices of love, commitment, word of honor, marriage, together until death do you part, the deepest love for eternity and happy endings, incite you to follow the right path, the duty to be, true happiness, family as the basis of society, congratulations for those who achieve welfare under that pattern induced by the system, religion and the manual of what is generally accepted.

They are half-truths, lies sustained by the fear of public scorn, double standards, open secrets, low passions. Generation after generation, revolutionary visions have arisen that seek to escape the archetypes, or perhaps try to justify their lifestyles outside the commandments, sacraments, values and ancestral and conservative moral principles.

What I am trying to say with this work is that there is always an opportunity to dominate the situation, to overcome adversity, to get out of the wall of the marked ones or even to pose smiling for the photograph of the so-called "unfortunates", perhaps, much more unhappy is the photographer who pretends to be who he is not.

I invite you to look in the mirror, make an exercise of introspection and get to the point, while there is life there are obstacles, you have to learn to live with them or die trying, after all, when they are gone, product of their own demons, if that is the case, well, the world will continue turning, some will learn to get out of predictable cataclysms and others will breathe a day like the previous one, decide on which side you want to be, thank you.

Those were the almost exact words of the contemporary philosopher Benardito Cajiga, I remember them like yesterday, it was the first conference of this kind that I covered in my work as a journalist of the welfare section of the newspaper "Un Nuevo Día". The lyricist presented his book "The Culture of Love" in the midst of a strong controversy due to the separation from his wife, after 20 years of marriage and two children together.

The book, in my opinion, is an ode to sincerity, it talks about two scenarios, on the one hand, doing meditation exercises, prayer, intermittent fasting and other practices to control temptations and feel the victory of reaching a safe harbor after rowing in turbulent waters, and the opposite station, clinging to the wise reflection that "to err is human" to justify weaknesses before some guilty pleasures, yes, guilty according to the prejudiced society.

That day, there was tension in the room where the press conference of the launching was taking place, because it was said that one of the journalists present was the cause of the separation between the writer and his wife, that's not all, the romance was fleeting, and the woman, 20 years younger, had left Bernardito Cajiga submerged in a deep existential crisis, and not for less, he left a relationship of years for an affair that lasted as long as a sigh.

I, being pro love, pro soap opera, pro Disney, well, sometimes I believe everything, it is that I find it hard to understand that everything is part of a marketing strategy to position a product.

The truth is that the aforementioned, the alleged lover, stood up to ask her questions, as she should: Don't you think Mr. Cajiga, that your reflections here expressed in the so-called "Culture of love", is only your point of view and does not represent the absolute truth, maybe you try, as your command of language, your recognition, your power of conviction, to massify an idea and the reality is that, not because it is logical for you, it is logical for others, the truth is relative, you should not project your personality in the world.

Mr. Cajiga answered: Yes, it is my point of view, it is that, if I talk about someone else's point of view, it would not be me, it would not make sense to write a book without my own ideas, what is not clear to me, is if you asked me a question or it is a statement, in case it is the second one, my answer I hope it has fulfilled your expectations and I am only going to talk about my neighborhood, there are more divorces than marriages and within marriage there is a balance between good and bad moments, says the wise phrase: "What doesn't kill us makes us stronger"... thank you, next to ask.

At that moment I understood that there was fire there, and well, where there is fire someone can suffer burns that leave scars that are difficult to erase.

Returning to the book, it changed my paradigm, I understood through the testimony of Cajiga, that for love I am a gypsy, "take advantage of me that if I arrived yesterday I can leave tomorrow" is that I need company and when I have it I want to be alone, I play the victim and I am a victimizer, it is difficult to ask for forgiveness, and well, I have not changed, but before Cajiga I did not know how to define myself, now I know who I am and "what I am is real, I am exactly what I want to be today".

"The Culture of Love" in a short time was a Best Seller and a reference in love relationships for its naturalistic vision, Bernardito devoted himself to lecturing as a coach in holistic wellness and couple therapy, little is known about his private life, I think he will give himself the opportunities in love that are necessary, because otherwise he would not preach by example, for my part, today I will go out with someone I met on the new Facebook app for flirting, I will have a few drinks and I will surely end up frolicking because I feel like it, I will not be so prudish.