Estamos a tan solo pocas horas del 24 de diciembre, y esta mañana, al abrir la puerta, veo un pequeño capullo.
Esta flor ha sido un regalo de uno de mis apreciados amigos que conocí en la universidad. Sabe que amo las plantas, así que me regalo un tallito. Y curiosamente, de todas mis flores de bella a las once, esta ha sido la más resistente.
Tal como nuestra amistad.
Soy de pocos amigos, la verdad. Decidí dedicarme a ser independiente, lo que conlleva mucho trabajo y tiempo invertido. Así que tengo poco espacio para compartir.
Por lo que en la universidad es cuando más conozco personas y comparto con mis amigos. Y debo decir que he tenido la fortuna de conocer seres maravillosos. Uno de ellos es mi amigo.
Conoce mi forma de pensar, de hacer las cosas, una buena parte de mis sueños y ambiciones, y está allí para mí. Es de esos amigos que te apoyan en lo que sea, te aconseja y, por si fuera poco, también trabaja en sus metas personales como yo.
Lo que me sorprende, porque desde que elegí mi camino de tener mi propio negocio, algunas personas que eran cercanas a mí solo me expresaban cosas negativas sobre mis propios sueños.
Y eso duele. Que no te apoyen, que no crean en ti.
Él ha sido todo lo contrario. Cuando lo conocí, lo primero que hice fue hablarle de que escribo en un blog. Recuerdo su sonrisa, y desde allí nos hicimos amigos. Puedo hablar sobre cualquier cosa, e incluso confiarle un secreto, y sé que lo guardará.
En esto me hizo pensar esta flor esta mañana. Es tan bonita, tan resistente, y cada vez que sale un capullo me hace sonreír.
Por lo que, antes que llegue la fecha tan esperada del año, deseo por ti que tengas una bonita amistad como una flor un 23 de diciembre.
Por alguien que te apoye, que crea en ti, que te mire con esa admiración y que te regale una sonrisa. Mejor dicho, muchas.
Que dé a tus días ese amarillo radiante, incluso en el anochecer. Que encuentres en ella consejo con tan solo mirarla, y por supuesto, también esa calidez que tanto anhelas.
Más que una flor, te deseo un jardín completo. ¿Por qué no? Si tenemos tanto dentro de nosotros, podemos plantar y plantar hasta tener un bosque en casa.
Así que quiero para ti, buenos amigos. Personas con las que puedas sentarte a conversar, con las que rías, y a las que quieras muchísimo.
Te lo deseo porque lo he encontrado y sé lo maravilloso que es. No solo a él, sino también a personas que, con tan solo verlas, o que llegue un mensaje a mi teléfono, me sacan una sonrisa.
Ese jardín mío no ha parado de crecer.
Y como no, si me la paso hablando hasta por los codos.
Por lo que entre mis metas de este año también estará cultivar amistades. Tener personas en mi vida que aporten a ella, que la llenen de luz, y con quienes me siento feliz compartiendo.
It's only a few hours until December 24th, and this morning, as I open the door, I see a little bud.
This flower was a gift from one of my dear friends that I met at university. He knows I love plants, so he gave me a little stem. And curiously, of all my flowers from Bella at Eleven, this one has been the most resistant.
Just like our friendship.
I have few friends, to be honest. I decided to dedicate myself to being independent, which entails a lot of work and time invested. So I have little space to share.
So at university is when I meet the most people and share with my friends. And I must say that I have been fortunate to meet wonderful beings. One of them is my friend.
He knows my way of thinking, of doing things, a good part of my dreams and ambitions, and he is there for me. He is one of those friends who supports you in whatever, gives you advice and, if that were not enough, also works on his personal goals like me.
Which surprises me, because since I chose my path of having my own business, some people who were close to me only expressed negative things to me about my own dreams.
And that hurts. That they don't support you, that they don't believe in you.
He has been the complete opposite. When I met him, the first thing I did was tell him that I write on a blog. I remember his smile, and from there we became friends. I can talk about anything, and even tell him a secret, and I know that he will keep it.
This is what this flower made me think of this morning. It is so pretty, so resistant, and every time a bud comes out it makes me smile.
So, before the long-awaited date of the year arrives, I wish for you that you have a beautiful friendship like a flower on December 23.
For someone who supports you, who believes in you, who looks at you with admiration and gives you a smile. Or rather, many.
May she give your days that radiant yellow, even at dusk. May you find advice in her just by looking at her, and of course, also that warmth that you long for so much.
More than a flower, I wish you a complete garden. Why not? If we have so much inside us, we can plant and plant until we have a forest at home.
So I want for you, good friends. People with whom you can sit down and talk, with whom you laugh, and whom you love very much.
I wish it for you because I have found him and I know how wonderful he is. Not only him, but also people who, just by seeing them, or a message arriving on my phone, make me smile.
That garden of mine has not stopped growing.
And of course, if I spend my time talking until I'm elbow deep.
So one of my goals for this year will also be to cultivate friendships. To have people in my life who contribute to it, who fill it with light, and with whom I feel happy sharing.
23/12/24
Texto y fotografías de mi autoría. Fotos editadas con Meitu.
Contacto a mis RRSS, o escribe a mi Discord: zulfrontado#2666
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